NinjaWorld
¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Versión para impresión

+- NinjaWorld (https://ninjaworld.es)
+-- Foro: País de la Espiral (https://ninjaworld.es/foro-pais-de-la-espiral)
+--- Foro: Puente Kannabi (https://ninjaworld.es/foro-puente-kannabi)
+--- Tema: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! (/tema-nos-comemos-unas-setas-y-pasa-esto)

Páginas: 1 2 3 4 5 6


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Inuzuka Etsu - 29/06/2018

No todo estaba saliendo de la mejor manera posible. Pero como su sabio y senil abuelo decía, toda situación es susceptible de poder empeorar. Al menos respiraba, mas o menos. Le costaba, para qué engañarnos, tenía una herida en el costado que casi le llevaba la vida en ello. El color carmesí casi blandía sus oscuras ropas, y no era por cosa de exagerar.

El Inuzuka había logrado herir en los ojos o periferias al Uchiha, iluso de él ni se había acordado de que tenía garras en vez de dedos. Un poco mas y eso le cuesta los ojos al chico, aunque tampoco es que no se lo mereciese a éstas alturas. Con un doble impacto que lejos de marearlo tan solo lo enfureció mas, el chico apartó al Inuzuka de sí. Eso ayudado a la intención del mismo, hizo que éste rápidamente se alejase unos cuantos metros.

Iracundo, el Uchiha respondió a las palabras del rastas con un mensaje que para nada estaba claro. Afirmaba que si lo dejaba estar, ella moriría. El Inuzuka quedó perplejo, sin saber muy bien qué decir a eso. Sorprendido y a la vez confuso.

P-pero... «¿Acaso ha hecho una apuesta con alguien poniendo en juego la vida de un familiar?» fue una de las ideas que taladró la mente del chico, que hasta pasado un medio lapso de tiempo, fue incapaz de siquiera preguntar —¿¿Qué cojones dices tío?? ¡Se te va la perola!

Por un instante, pudo notar que su respiración era mucho mas alterada de lo normal. El chico tenía algo de razón, o bien estaba fatal de la cabeza. Por si acaso, el Inuzuka olisqueó, quizás buscando a un tercero escondido. La humanidad podía llegar a ser tétrica, pero... ¿tanto como para obligar a alguien a combatir y si perdía matar a un familiar?

Sin pretenderlo del todo, pero sin poder evitarlo... volvió a desviar su mirada hacia Akane. Su hermano aún corría peligro cerca de ese demente. Pero tampoco podía arriesgarse a hacer un movimiento brusco, sabía bien que su oponente era tan rápido o mas que él.




Estado de Etsu


52/170


101/150

+10



—Objetos:

  • Nada


Técnicas usadas:


¤ Gijū Ninpō: Shikyaku no Jutsu
¤ Arte del Ninja Bestia: Técnica de las Cuatro Patas
- Tipo: Apoyo
- Rango: C
- Requisitos: Inuzuka 25
- Gastos:
  • 10 CK activar (divide regen. de chakra)
  • (Inuzuka 50) (multiplicable x2)
- Daños: +10 PV a arañazos y mordiscos
- Efectos adicionales: Fuerza +5, Resistencia +5, Aguante +5, Agilidad +5
- Sellos: Ninguno
- Velocidad: Instantánea
- Alcance y dimensiones: -
Al envolver el cuerpo entero en chakra y moverse a cuatro patas, los Inuzuka pueden ganar los reflejos, los instintos y la velocidad de una bestia salvaje.

Esta técnica forma la base del estilo de taijutsu de sus miembros, y modifica la apariencia del usuario ligeramente, adaptándola aún más a la de un animal: sus colmillos y uñas crecen hasta convertirse en garras, y sus pupilas se contraen hasta volverse afiladas. Además, bajo sus efectos, un Inuzuka mostrará grandes aumentos de sus atributos físicos.

Esta forma es perfecta para tácticas de golpeo y retirada, que dentro del clan es bien conocido por apenas dejar tiempo al oponente para contraatacar. Este estilo de lucha se conoce por el nombre de Jūjin Taijutsu (Taijutsu del Hombre Bestia) y contiene numerosos ataques y técnicas secretas.


  • --
  • --


  • --
  • --



RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Uchiha Datsue - 29/06/2018

Cuando se llevó la mano al rostro, que le dolía y escocía, y halló sangre en él, sintió que la piel le ardía. No había cosa que más odiase en el mundo a que le golpeasen en el rostro, y ya si le dejaban cicatriz…

P-pero... ¿¿Qué cojones dices tío?? ¡Se te va la perola!

¡A ti sí que se te va! —le rebatió, más con el alma que con argumentos.

A espaldas de Etsu, se oyó unos cascos de caballo repicar contra el puente de piedra. Un corcel negro avanzaba hacia ellos, tirando de un carro lleno de heno y dos agricultores. Uno de ellos, alto y flacucho, con un sombrero de paja y un palillo en la boca. El otro, más pequeño y regordete, con una fea cicatriz que le desfiguraba el rostro.

Tal y como iban… Sí, pasarían al lado de Etsu y Datsue, y por encima del perro que yacía en el suelo.




Estado de Datsue


119/200


108/280

+10
divide regen.

*Sharingan activado*


—Objetos:

  • Hitai-ate [cuello]

  • Portaobjetos básico (10/10) [costado derecho]
    • Hikaridama x1
    • Chīsana Hyōrōgan x1
    • Ōkina Chirōgan x1
    • Bomba sonora x1 x0
    • Shuriken x3 x2
    • Hilo shinobi x1
    • Paquete de 5 senbon x1
    • Chīsana Makimono x1 (3/3)
      • Paquete de 15 makabishi x1
      • Bomba de humo x1
      • Comunicador avanzado x1

  • Sellados en el cuerpo (6/6)
    • Kunai x1 x0 [palma derecha]
    • Sello explosivo de clase B x1 [palma izquierda]
    • Oto Fuda x1 [dorsal de la mano derecha]
    • Fuda Kami x1 [dorsal de la mano izquierda]
    • A-ranku no Kibakudama x1 [antebrazo externo izquierdo]
    • Shuriken x1 [antebrazo externo derecho]



RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Inuzuka Etsu - 29/06/2018

El Uchiha se llevó la mano a la frente frente a la pregunta del Inuzuka, y no tardó absolutamente nada tras ver su sangre de replicar que allí el único al que se le iba la perola era a él. Evidentemente ofendido, puesto que en ese debate por ver quién estaba o no mal de la azotea, su antagonista ganaba de calle... el chico no pudo evitar mostrar su mueca y evidente desacuerdo. No, no había manera en que su autodefensa no hubiese sido mas que correcta. Lo había hecho porque a ese chico se le había ido el juego de las manos, ni mas ni menos.

No soy yo el que está peleando como si la vida le fuese en ello por algún tipo de movida rara... ¿acaso te has drogado o qué?

Sin embargo, no podía dejar de lado la otra opción, que estuviese en un auténtico apuro. El chico, apenas hubo respingado, logró descifrar en el ambiente un claro olor animal —además de su hermano— no demasiado lejos, pues el aroma era intenso. Tan intenso, que se podía escuchar. Tan intenso, que el chico tuvo que girar el rostro para poder observar un carromato que se dirigía a toda velocidad hacia ellos. Quizás no para pasar sobre ellos, pero si que destrozaría a Akane si no se apartaba. Por desgracia para él, no reaccionaba.

Ni lo pensó, era un riesgo, pero debía hacerlo.

Rápido como un rayo, pese a que le dolía como mil infiernos el costado y el estómago, salió corriendo directo y sin titubeos hacia su huskie. Apenas lo hubiese podido alcanzar, lo tomaría y rodaría hacia un costado, buscando ajustarse de manera holgada al paso del susodicho carruaje.

Maldita sea... ¡tsk! —chasqueó la lengua, incapaz de ocultar que verdaderamente le dolía la herida.

Pero mas le dolería dejar a su hermano en el sitio y verlo atropellado, sin duda eligió bien.


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Uchiha Datsue - 29/06/2018

No soy yo el que está peleando como si la vida le fuese en ello por algún tipo de movida rara... ¿acaso te has drogado o qué?

¡Tú sí que te has drogado! —Qué divertido era el y tú más. Una defensa fácil, sencilla y que no requería de tener ni dos neuronas conectadas—. ¡Casi me dejas ciego y tu perro cojo de por vida!

No, todavía no se había desahogado lo suficiente. La rabia y determinación homicida que le había invadido hacía unos instantes, sin embargo, estaba mitigando. Datsue se había equivocado en algo: aquella batalla no decidiría el éxito o no del rescate de Aiko.

Los acontecimientos, no obstante, les hicieron preocuparse por otra cosa. Etsu se abalanzó sobre su perro, apartándole del trayecto del caballo y el carro. Caballo que, al ver momentáneamente a Etsu delante, se encabritó y a punto estuvo de hacer que el carro se estrellase contra la barandilla del puente.

Se escuchó un leve ploc de fondo.

El hombre de la cicatriz tiró de las riendas y logró detener al caballo.

¡Hijueputa! ¡Mira por dónde vas, ca…!

¡Plaf! El hombre del sombrero le acababa de cruzar la cara. Se quedó callado, con la mirada baja y tan sumiso como un cachorro al que acaban de regañar.

El hombre del sombrero se bajó del carro. Vestía un chaleco azul, una camisa de cuadros por debajo y un pantalón vaquero, que terminaba introduciéndose bajo unas botas altas.

Disculpen aquí a mi hermano. —Hablaba con esa rara destreza que tienen algunos hombres para vocalizar con un palillo en la boca—. Y, pues, se puso un poquito nervioso. —Tenía un acento extraño, como muy melodioso—. ¿Se encuentran ustedes bien? ¿Algún herido?


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Inuzuka Etsu - 30/06/2018

Y como si estuviesen jugando al ping pong, pasaron de uno a otro las culpas como si fuesen una mera pelota. Casi parecía un comportamiento infantil, si es que no lo era. Datsue, buscando quedar en mejor lugar, de nuevo cruzó la culpa de todo el jaleo a Etsu, alegando que era él quien casi lo deja ciego de por vida, y su perro casi lo deja cojo. El teatro se le daba bien, sin lugar a dudas, o eso o bien estaba como una puta cabra y era capaz de creerse hasta sus propias mentiras.

«Increíble, vamos...»

Sin embargo, lo que realmente era increíble es que el conductor del maldito carro que casi atropella a Akane se agregó al conflicto sin ton ni son. Estaba claro que había sido cosa de no mirar por donde iba que casi los revienta de un testarazo, pero no contento con ello alzó la voz en pos de insultar.

Por suerte o por desgracia, la cosa no duró mucho. El que estaba a su vera lo calló de un sopapo, uno rotundo y que drásticamente le quitó el mal humor al hombre. Etsu apenas había tenido tiempo para devolerle las palabras cuando su hermano se disculpó en su nombre, y preguntó si se encontraban bien. El hombre, con un palillo en la boca y un acento de lo mas peculiar, realmente no parecía tener nada que ver con su supuesto hermano. Ya fuese en las maneras, como en la manera de hablar... había un drástico cambio.

Poco ha faltado para que atropellasen a Akane —informó, buscando averiguar si estaba bien.

Akane espabilaba en ese mismo instante, como si hubiese sido preso de algún tipo de artimaña del Uchiha. Etsu no pudo contener sus emociones, y lo abrazó con fuerza, a la par que frotaba su cabeza. Se alegraba de veras de que estuviese bien.

Ya está, ya está... —le susurró a su can, dándole ánimos.


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Uchiha Datsue - 30/06/2018

Un fuerte vínculo el que hay entre ustedes dos —comentó, al ver cómo Etsu se abrazaba a su perro. Luego miró a Datsue, con la cara manchada de sangre, y realizó una pequeña reverencia—. Mi corazón se agita como el de un cavalo encabritado al ver que están ustedes tres sanos y a salvo.

Se quitó el sombrero e hizo una senda reverencia. Luego se lo volvió a ajustar.

Que tengan ustedes un buen día, cavaleiros

El hombre se volvió a montar en el carro, y su hermano espoleó al caballo. Fue entonces cuando Etsu lo vio. Justo debajo de donde instantes antes había estado el carro, yacía un pergamino. Un Chīsana Makimono.


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Inuzuka Etsu - 30/06/2018

El hombre del carruaje —el que no era conflictivo— aseguró que el vínculo entre hombre y can era realmente fuerte. Razón no le faltaba. Pero su comportamiento fue un tanto singular. Miró al otro chico, que sangraba como un cosaco también, y terminó por asegurar que su corazón se agitaba como un cavalo encabritado sabiendo que estaban los tres sanos y salvos.

Quizás al pobre hombre había que hacerle un croquis.

Pero fuese como fuese, ninguno de los allí lastimados fue capaz de corregir al hombre. Quedaron perplejos ante las maneras, que al menos intentaba lucir, observando que tras ello se despedía. Por absurdo y surrealista que pudiese parecer, en el mismo momento en que casi descarrilan había caído algún tipo de pergamino al suelo, y había quedado oculto bajo el propio carruaje.

Pero ellos no se habían dado cuenta, y sin duda se disponían a irse. Etsu alzó la mano hacia ellos, dispuesto a hacer un bien por un desconocido —¡¡Oigan!! ¡SE LES HA CAÍDO ESO! ¡ALTOOOOO!

Casi parecía que le iba la vida en ello, aunque por desgracia no estaba como para salir corriendo tras de ellos...

Si bien se paraban, si que podría devolverles el susodicho pergamino, pero de lo contrario... no, ni de coña iba a lastimarse mas en pos de devolver un mero pergamino. No estaba en condiciones de hacerlo.


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Uchiha Datsue - 30/06/2018

Datsue buscó una píldora de sangre en su portaobjetos y se la tragó, mientras observaba curioso, como si estuviese al otro lado de una pantalla de cine, la escena.

El hombre del sombrero ni se había inmutado al verle la sangre. Como si sus heridas fuesen imaginaciones del propio Uchiha. O, quizá, porque el hombre estaba más que acostumbrado a verla. O simplemente porque tenía cosas más urgentes de las que preocuparse. «¿Un campesino? Sí, quizá de dar comer a las vacas…»

La sospecha aumentó cuando, al marchar, se vio un pergamino en el suelo. ¿Se le había caído del carromato cuando el caballo se encabritó e hizo saltar el carro? Y, más importante, ¿qué hacían dos agricultores con un pergamino ninja?

Etsu, como ese niño odioso de clase que se sabe todas las respuestas y no para de levantar la mano para que le pregunten a él, no tardó ni un segundo en avisar a los hombres a grito pelado. El Uchiha chasqueó la lengua. Le hubiese sido tan fácil romper el sello y liberar su contenido…

Pero parecía que se iba a quedar con las ganas, porque el carro se detuvo en el acto. Parecieron discutir algo entre ellos, y luego el del sombrero de paja se bajó con la misma tranquilidad y sonrisa de antes. Caminó hasta Etsu con parsimonia. Sus ojos, no obstante, pasaron de la bandana del kusajin —sujetada en su brazo— a la de Datsue —colgando del cuello—.

Y, pues, parece que ha habido un error —sonrió, y pasó el palillo de un lado de la boca al otro con un simple movimiento de lengua—. Y yo que pensé que se nos había caído un fardo de heno. Y, pues, como verá usted soy un pobre hombre de tierra —hizo hincapié en la última palabra—. De campo. ¿Para que iba un pobre ignorante como yo a necesitar de ese papel? No es mío. Pero le agradezco la preocupación.


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Inuzuka Etsu - 30/06/2018

Ante la llamada de atención por parte de Etsu, el hombre de fácil insulto detuvo rápidamente el carruaje. El de mejores modales, dentro de lo que cabe, bajó de nuevo y terminó por decir que ellos eran de campo, que quizás podrían haber perdido un fardo de heno, pero que ese pergamino no tenía nada que ver con ellos. Al decirlo, la verdad es que el Inuzuka casi se siente avergonzado, mas que nada por el malentendido.

Ahora quedaba por saber de quién era, puesto que allí no habían mas personas.

Etsu se llevó la mano tras la nuca, e intentó mostrar una cordial sonrisa, pese a que le costaba disimular un poco su dolencia —ostras, pues lo siento mucho... supongo que será de otra persona.

Sin demora alguna, el hombre retomó su posición anterior en el carro, y partió sin más. Etsu quedó por un momento en silencio, sin saber muy bien qué hacer o decir al tarado que tenía a pocos metros de él. Si, sin duda la situación era algo tensa aún...

Lo miró, miro al pergamino, y terminó por mirar a Akane. Con poco mas que esos elementos se habían hecho mejores chistes en la época.


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Uchiha Datsue - 1/07/2018

Datsue le daba vueltas a lo que acababa de hacer. La píldora de sangre, en teoría, era para acelerar su reposición tras una gran pérdida. ¿Tanto había perdido con aquel arañazo, por aparatoso y doloroso que fuese? No, no lo había hecho, y por eso…

… el Uchiha acababa de hacer lo que más odiaba en el mundo: desperdiciar dinero. Porque aquella píldora valía un riñón.

Se desanudó la bandana y miró su reflejo en la placa metálica. La visión hizo que el corazón se encogiese de golpe. Seguramente no era tan malo como parecía, pero veía sangre, mucha sangre. Como aquel hijo de puta le dejase cicatriz… iba a matarle. Por los Dioses que iba a matarle.

Volvió a colocarse la bandana y se sacó un pañuelo de un bolsillo. Con cuidado, se fue quitando la sangre de su rostro, sin tocar demasiado en la herida. Luego observó a Etsu, allí de pie, con el pergamino en la mano. No tenía ninguna gana de hablarle… pero la curiosidad le podía.

Si lo abres podrías encontrar una pista de su dueño —sugirió.


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Inuzuka Etsu - 1/07/2018

Por último, y no menos importante, quedó observando el pergamino que recién encontraban. El silencio aún era rey absoluto, ninguno de los chicos parecía querer dirigirle la palabra al otro. Cada cual con su motivo, ya fuese mas o menos acertado, pero ninguno parecía querer retractarse. Por suerte, al menos no continuaban peleando como si la vida les pendiese en ello. Todo un alivio.

El pergamino casi se le cae de las manos cuando Datsue habló de nuevo. Se había tomado su tiempo, pero le había pillado por sorpresa. Una, dos, o incluso tres cabriolas llegó a dar en el aire el pergamino de mano a mano. Pero a últimas llegó a atraparlo con firmeza. Desvió la mirada al chico, sin demasiadas ganas de continuar hablando con él. Pero por un momento tenía parte de razón...

¿Cómo averiguar de quién era sin siquiera echarle un vistazo? La curiosidad mató al gato.

S-si... claro... —contestó, para a no mucho tardar desenrollar el pergamino. Sin demora, buscó en éste algún dato, o alguna cosa que pudiese serle de utilidad para saber de quién era, o al menos saber de qué se trataba.


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Uchiha Datsue - 1/07/2018

Y cuando Etsu lo abrió, encontró…

…complicadas fórmulas de sellado, que, si uno se fijaba bien, parecían cobrar la forma de una hoja. Una hoja de cannabis sativa, más conocida como marihuana.

El Uchiha se aclaró la garganta.

¿Y bien? —preguntó, intrigado. Verán, dígase una cosa de Uchiha Datsue: es un maestro mintiendo. Y, por tanto, como todo buen maestro, acostumbraba a entrever los pequeños rastros que dejaban una mentira. Esa falsa sonrisa. Ese temblor en el labio. Esos ojos súbitamente dilatados. Cuando tenía el Sharingan activado, esas huellas brillaban como luciérnagas en la oscuridad.

Por eso sabía, en un grado de seguridad bastante alto, que aquel hombre había mentido respecto a que no era suyo el pergamino.

¤ San Tomoe no Sharingan
¤ Ojo Giratorio de Tres Aspas
- Tipo: Apoyo
- Rango: S
- Requisitos: Uchiha 60
- Gastos: 18 CK (divide regen. de chakra)
- Daños: -
- Efectos adicionales: Percepción +18
- Sellos: -
- Velocidad: Instantánea
- Alcance y dimensiones: -
Los iris del usuario se vuelven de color carmesí, y alrededor de sus pupilas surgen tres aspas negras que giran hasta formar un trío en una circunferencia imaginaria. Este estado del Sharingan se considera el más avanzado en su forma básica.

El Sharingan le da color al chakra, y permite distinguir su composición elemental. El usuario puede ver el flujo del chakra de otros seres vivos como un manto, con suficiente precisión para detectar si tiene mucho o poco chakra (CK actual) o si ese chakra es débil o poderoso (mide aproximadamente el Poder), pero no con la suficiente para detectar movimientos de chakra dentro de un oponente si no hay una técnica activa. El Sharingan puede ver el chakra de las técnicas activas: las que afecten al interior de un ser vivo o las que ya se encuentren en el exterior de un oponente, pero no antes de que se hayan formado. Puede detectar si alguien está siendo afectado por una técnica ilusoria.

La percepción visual del usuario goza de un gran estímulo, volviéndose muy sensible al movimiento. El Uchiha puede leer labios con extrema facilidad o imitar movimientos tan sutiles como los de la escritura, escribiendo lo mismo que alguien a quien está observando. En combate, el clan utiliza esta destreza para seguir con claridad los movimientos físicos (y no de técnicas, importante) de un oponente y de sus extremidades en el Taijutsu, y para leer con claridad los sellos manuales que realiza. Si y sólo si el usuario conoce la técnica que va a utilizar, puede anticipar una respuesta (hay muchas técnicas con secuencias de sellos similares o iguales. En este caso, el Uchiha no tiene manera de saber qué va a hacer el oponente). El Tres Aspas hace que el Uchiha pueda predecir dónde va a encajar un golpe de Taijutsu mediante la lectura de las tensiones en los músculos del cuerpo del oponente, dotándole de cierta capacidad predictiva. Cabe destacar que aunque el usuario sea capaz de percibir un movimiento, necesita las capacidades físicas y de reacción para poder responder ante él.

La habilidad para leer los movimientos del Sharingan le otorga al usuario la capacidad de copiar los sellos de una técnica de Ninjutsu o de Genjutsu (o los movimientos de una técnica de Taijutsu) que no dependa de una facultad personal para ejecutarla al mismo tiempo que el oponente o registrarla en su repertorio (hasta un máximo de tres técnicas). Se pueden imitar evolutivas, pero no registrarlas. Para copiar una técnica se debe de tener su requisito convertido a la facultad Uchiha.

El Sharingan le permite al usuario distinguir técnicas como los clones simples (no los generados por la técnica Kage Bunshin no Jutsu) de un usuario real, y ver a través de la técnica Henge no Jutsu.

El Sharingan de Tres Aspas es capaz de penetrar y romper los Genjutsus sensoriales, y de ver a través de las imágenes creadas por los Genjutsus ambientales.

Alterador (El Reflejo del Alma): Debido a la visión otorgada por el Sharingan, Datsue puede percibir los detalles más sutiles del lenguaje corporal de las personas, e incluso la más leve contracción muscular (incluida la pupila). Gracias a esto, ha desarrollado la habilidad de deducir con elevado grado de precisión cuando una persona le está mintiendo.

Para que dicha habilidad surja efecto, Datsue deberá tener mayor Percepción que el Carisma de su objetivo. Cuanta mayor sea la diferencia, más fácil le resultará discernir entre la verdad y la mentira.



RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Inuzuka Etsu - 1/07/2018

Para cuando abrió el pergamino y pudo husmear en su contenido, el chico quedó realmente confuso. En éste tan solo habían letras, letras que formaban curiosamente un dibujo parecido al de cierta planta con efectos... en fin, si, que era un dibujo de una hoja de marihuana. Arqueó una ceja, y su rostro parecía un poema de Calderón de la Barca. Devolvió la mirada a Datsue, que parecía algo intrigado, y no supo muy bien qué responder.

Pues... no son mas que letras raras haciendo un dibujo... el dueño era todo un artista.

El chico se encogió de hombros, y volvió a enrollar el pergamino. No había ningún motivo que lo atase a él, y no tenía forma de saber a quién pertenecía. Ni siquiera tenía un nombre, o alguna sigla que pudiese usar en su descifrado. Tras tenerlo recogido, terminó por lanzarlo hacia el Uchiha, no con mala gana, si no en pos de que éste pudiese echarle un vistazo también.

Aún no confiaba en poder llevarse bien con el Uchiha, eso estaba claro, pero tampoco había motivo por el cuál alimentar ese fuego tan abrasivo que había entre ambos. Mejor era dejarlo estar, pese a que su costillar y su estómago le requerían venganza. En fin, los Beattles lo dijeron en su día.


RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Uchiha Datsue - 1/07/2018

¿Letras raras? ¿Haciendo un dibujo? Eso tenía toda la pinta de…

Etsu le lanzó el pergamino.

… ¡en efecto! ¡Un pergamino con un clave de sellado! Solo su dueño —o alguien a quien le pasase la clave—, podía liberar su contenido. A no ser que te llamases Uchiha Datsue, claro. En ese caso, quizá había la posibilidad de descifrarlo y romperlo.

Se sonrió, presumido, mientras sus ojos pasaban ávidos por cada letra, por cada símbolo. Ante él tenía un rompecabezas, y, para su decepción, no uno ingenioso ni complicado. Más bien, tiraba por lo básico, más allá de que su forma fuese de lo más excéntrica.

No es un artista, kusareño, sino más bien un chapuzas —le rebatió finalmente—. Un novato que se cree más de lo que es —Esa descripción le sonaba a alguien…

Sacudió la cabeza, quitándose aquellos pensamientos extrañamente humildes. No era propio de él.

En este pergamino hay sellado un objeto… o una técnica. ¡Veamos! —con un movimiento dramático, estiró del todo el pergamino y lo estampó contra el suelo. Luego, empezó a hacer complicados sellos de mano. En realidad, no necesitaba hacerlos. Acababa de descifrar ya la clave, pero un buen especialista en Fūinjutsu no era nada sin su misterio y dramatismo—. ¡Fuah! ¡You! ¡SHOU! —estampó una mano en el pergamino…

… éste emitió un brillo en el centro del sellado…

… y liberó su contenido. ¿Qué era? Una bolsa con setas. Setas marrones de tallo blanco.

¿Qué cojones…?

¤ Ippan no Fūinjutsu
¤ Técnica de Sellado General
- Tipo: Apoyo
- Rango: C
- Requisitos: Fūinjutsu 15
- Gastos: 10 CK (sellado de objetos y armas), 5 CK (liberar)
- Daños: -
- Efectos adicionales:
  • Sella objetos y armas en pergaminos
  • (Fūinjutsu 30) El usuario gana la capacidad de sellar objetos y armas de cualquier extensión (preguntar a un administrador en caso de duda) en pergaminos. Además, puede guardar gases venenosos, líquidos...
  • (Fūinjutsu 60) El usuario gana la capacidad de sellar objetos y armas de cualquier extensión (preguntar a un administrador en caso de duda) en cualquier tipo de recipiente (preguntar a un administrador para saber qué recipiente podría ser válido, solo es posible sellar 1 objeto), y en su propio cuerpo (1 por cada 10 de Inteligencia)
- Sellos: Buey → Serpiente → Tigre → Jabalí → Carnero (mantenido durante unos segundos)
- Velocidad: Moderada
- Alcance y dimensiones: (ver descripción)
Técnica estándar de fūinjutsu, que utilizan muchos shinobi con diferentes niveles de maestría en técnicas de sellado. Los ninjas con un nivel de maestría bajo son capaces de sellar objetos y armas, normalmente de tamaño pequeño o mediano, y únicamente en pergaminos. Los ninjas de nivel medio son capaces de sellar muchos tipos de sustancias distintas en pergaminos. Los ninjas de nivel alto, en su propio cuerpo o incluso en recipientes.

La técnica no funciona instantáneamente. Para sellar objetos en un pergamino, se ha de abrir ese pergamino. En el caso de querer guardar algo en el propio cuerpo, no es necesaria tanta preparación. Para guardar cosas en un recipiente externo, se ha de disponer de uno válido (obviamente). En cualquiera de los tres casos, se ha de estar a menos de tres metros de donde se va a sellar el objetivo, y a menos de diez del objetivo. Una vez realizados los respectivos sellos, se mantiene el último y el objetivo se deshace en una masa de chakra, que viaja a velocidad moderada hasta introducirse dentro del lugar donde se desee sellar. Entonces aparece la marca deseada, y el sellado se completa.

Se ha de remarcar que esta técnica de sellado no dispone de una clave para nada complicada. Los sellos podrán ser rotos y su contenido liberado por cualquier practicante de fūinjutsu con suficiente maestría (15, 30 ó 60).



RE: ¡Nos comemos unas setas y pasa esto...! - Inuzuka Etsu - 1/07/2018

Datsue pilló al vuelo el pergamino, y tras ello le echó un breve vistazo. Alegó que el dueño de ese pergamino no era mas que un chapuzas, un novato que aspiraba demasiado alto. Sin duda alguna, eso casi sonó a un nuevo golpe. Pero hubo de dejarlo estar. No estaba la cosa como para pegarle un puñetazo en plena jeta, al menos no por el momento.

El Uchiha, tras analizarlo brevemente, determinó que dentro de éste había un objeto o una técnica. Eso sonaba ridículo, el Inuzuka no entendía de qué leches estaba hablando su antagonista. El chico estampó el pergamino totalmente desplegado contra el suelo, y comenzó a realizar una realmente extendida serie de sellos. La complejidad de la técnica que estaba realizando parecía abrumadora, jamás había visto tanto espectáculo para algo. Sin mas, concluyó dando un golpe en el pergamino, y éste brilló por un instante.

Los ojos del Inuzuka quedaron abiertos como platos al ver que del pergamino había surgido una bolsa. No por el contenido de la misma, si no por la manera en que ésta había aparecido. Obviamente, tampoco pudo dejar de lado el contenido de la misma... ni él ni su antagonista.

¿Qué cojones... ? —al igual que Datsue, no pudo evitar preguntarse lo mismo.

Lanzó su dedo acusador hacia la bolsa de setas, tambaleandolo levemente en la dirección a la misma. La miraba con la ceja arqueada, y volvió la mirada al chico. Volvió la mirada a las setas, y al chico. De nuevo lo hizo, y terminó por acentuar aún mas su mueca de no comprender nada.

No jodas... —acertó a decir, al fin —esas setas... seguro que no son cosa buena...

¿Qué mas decir? Esas setas, y mas con el dibujo que llevaba el pergamino... no, no podían significar nada bueno.


This forum uses Lukasz Tkacz MyBB addons.