24/04/2016, 13:04
Aquel camarero sonrió a ambos jóvenes al tiempo que anotaba los pedidos en su pedidos en la pequeña libreta que llevaba, para después arrancar la hoja en la que había escrito y pasarla por un pequeño hueco dentro de la cocina, seguidamente se dirigió hacia ambos jóvenes, aun sin quitar la sonrisa de su rostro.
-Enseguida estará listo el pedido.-Dijo el hombre amablemente antes de marcharse por la puerta de la cocina.
En aquel momento Rin se giro hacia su derecha y alcanzo tres pares de palillos, estos palillos estaban unidos por la parte de arriba de de en dos, le entregó un par a Mitsuki y dejando otro en la mesa, cogiendo el ultimo entre sus dedos para romperlo por la parte de arriba y así ya tenerlos para listos comer. Después miro a la chica de una manera un poco infantil, sonriendo también, como era costumbre en el.
-¿Que es lo que te has pedido?- Pregunto el chico sin borrar aquella sonrisa de su rostro, al tiempo que jugueteaba con los palillos entre sus dedos, con cierta diversión. La verdad es que no sabia estarse quito ni un momento, le costaba poder estar centrado solamente en una cosa y no hacer nada mas, no obstante sabia estar atento a varias cosas, por lo que aquella especie de hiperactividad no era del todo negativa. La pregunta que le hizo fue porque nunca había comido aquello, ya que no sabia pronunciarlo y le daba demasiado vergüenza decirlo en algún restaurante y equivocarse al hacerlo.
-Enseguida estará listo el pedido.-Dijo el hombre amablemente antes de marcharse por la puerta de la cocina.
En aquel momento Rin se giro hacia su derecha y alcanzo tres pares de palillos, estos palillos estaban unidos por la parte de arriba de de en dos, le entregó un par a Mitsuki y dejando otro en la mesa, cogiendo el ultimo entre sus dedos para romperlo por la parte de arriba y así ya tenerlos para listos comer. Después miro a la chica de una manera un poco infantil, sonriendo también, como era costumbre en el.
-¿Que es lo que te has pedido?- Pregunto el chico sin borrar aquella sonrisa de su rostro, al tiempo que jugueteaba con los palillos entre sus dedos, con cierta diversión. La verdad es que no sabia estarse quito ni un momento, le costaba poder estar centrado solamente en una cosa y no hacer nada mas, no obstante sabia estar atento a varias cosas, por lo que aquella especie de hiperactividad no era del todo negativa. La pregunta que le hizo fue porque nunca había comido aquello, ya que no sabia pronunciarlo y le daba demasiado vergüenza decirlo en algún restaurante y equivocarse al hacerlo.