8/05/2016, 01:48
Nadie tenía que enterarse que la chica no sabía nadar ni andar sobre el agua ya que llegado el momento lograría hacerlo, lograría plantar los pies en el agua sin hundirse y sin la necesidad de aprender a nadar. Además que se encargaría de eludir todo tipo de trabajo en el que se vea obligada a meterse bajo el agua por obvias razones.
Lo importante en este instante era reunirse una vez más con el calvo que parecía haber seguido sin problemas el camino de la paloma que les guiaba a quién sabe dónde. ~¡No tendría que haberme metido en esto! ~Se lamentaba la de Taki mientras corría lo más rápido que sus piernas le permitían.
Finalmente junto con la Hyuuga alcanzaron al hombre que permanecía inmóvil frente a una peculiar construcción que parecía estar cerca del derrumbe. —No me jodas… —Soltó la rubia ante el silencio de los otros dos. De la paloma ni rastro había, por lo que se podía deducir que se había metido o mismo el calvo la había perdido de vista, cualquiera de las dos opciones era simplemente horrenda y Noemi al menos no estaba dispuesta a darse más vueltas.
—Me voy a casa. —Sentenció finalmente con un tono que dejaba en evidencia lo irritada que estaba. Desde su perspectiva la paloma los había guiado a un lugar abandonado y para colmo este animal era la única forma de orientarse que tenían, por ende se verían obligados a atraparle, casi una hazaña teniendo en cuenta que no tienen redes ni nada por el estilo a su alcance. ~Pérdida de tiempo… ~Refunfuñaba la malhumorada kunoichi, ignorando que en primer lugar ni sabía si estaba yendo en dirección a algún pueblo o al límite del mundo. Ya algo se encontraría.
Lo importante en este instante era reunirse una vez más con el calvo que parecía haber seguido sin problemas el camino de la paloma que les guiaba a quién sabe dónde. ~¡No tendría que haberme metido en esto! ~Se lamentaba la de Taki mientras corría lo más rápido que sus piernas le permitían.
Finalmente junto con la Hyuuga alcanzaron al hombre que permanecía inmóvil frente a una peculiar construcción que parecía estar cerca del derrumbe. —No me jodas… —Soltó la rubia ante el silencio de los otros dos. De la paloma ni rastro había, por lo que se podía deducir que se había metido o mismo el calvo la había perdido de vista, cualquiera de las dos opciones era simplemente horrenda y Noemi al menos no estaba dispuesta a darse más vueltas.
—Me voy a casa. —Sentenció finalmente con un tono que dejaba en evidencia lo irritada que estaba. Desde su perspectiva la paloma los había guiado a un lugar abandonado y para colmo este animal era la única forma de orientarse que tenían, por ende se verían obligados a atraparle, casi una hazaña teniendo en cuenta que no tienen redes ni nada por el estilo a su alcance. ~Pérdida de tiempo… ~Refunfuñaba la malhumorada kunoichi, ignorando que en primer lugar ni sabía si estaba yendo en dirección a algún pueblo o al límite del mundo. Ya algo se encontraría.