9/07/2016, 22:46
Indiferentemente de lo que la rubia hiciera, Ritsuko llevaba la ventaja por varias gallinas ya y no se dejaría estar, claro que no, no iba a ponerse a lavar las bragas de otra que no sean las suyas propias así que tenía que mantener esa ventaja cueste lo que le cueste.
En el momento de llevar la última gallina atrapada a la jaula, la contraria llevó una más que traía como si fuera un sombrero y realmente la menor esperaba que ese ‘sombrero’ hiciera su gracia sobre la contraria pero lamentablemente no ocurrió, pero siempre habría más oportunidades para ello.
Puesto que no quería seguir perdiendo su tiempo en esa fría granja, la pelirroja sin mediar palabra con su compañera volvió a correr en dirección a las gallinas y puesto que habían estado quietas todo ese rato no lograron alejarse lo suficiente para que ella no atrapase alguna y así, con otra gallina entre manos la chica se fue dando saltitos en dirección al gallinero donde metió el ave sin problemas.
—Ocho. —Comentó con satisfacción.
Tras cerrar el gallinero la kunoichi se volteó a ver lo que la rubia hacía, casi parecía que se iban turnando para atrapar los animales y siendo realistas, eso había disminuido la cantidad de accidentes que podrían tener aquellas dos para bien o para mal.
El dueño claro, no parecía nada contento con ello y esperaba con paciencia que volvieran a chocar o algo entre ellas, con un poco de suerte se rasgaban la ropa o algo entre tantos tropezones o alguna de las gallinas hacía el trabajo sucio al intentar escaparse.
—Cinco contra tres… Creo que vas un poco atrasada. —Soltó burlona a su compañera aun esperando de pie frente al gallinero.
Si las cosas seguían así llegarían a una cifra que marcaría la victoria de Ritsuko y Noemi claro, no podría ni quejarse al respecto puesto que fue ella la que vino con la apuesta.
En el momento de llevar la última gallina atrapada a la jaula, la contraria llevó una más que traía como si fuera un sombrero y realmente la menor esperaba que ese ‘sombrero’ hiciera su gracia sobre la contraria pero lamentablemente no ocurrió, pero siempre habría más oportunidades para ello.
Puesto que no quería seguir perdiendo su tiempo en esa fría granja, la pelirroja sin mediar palabra con su compañera volvió a correr en dirección a las gallinas y puesto que habían estado quietas todo ese rato no lograron alejarse lo suficiente para que ella no atrapase alguna y así, con otra gallina entre manos la chica se fue dando saltitos en dirección al gallinero donde metió el ave sin problemas.
—Ocho. —Comentó con satisfacción.
Tras cerrar el gallinero la kunoichi se volteó a ver lo que la rubia hacía, casi parecía que se iban turnando para atrapar los animales y siendo realistas, eso había disminuido la cantidad de accidentes que podrían tener aquellas dos para bien o para mal.
El dueño claro, no parecía nada contento con ello y esperaba con paciencia que volvieran a chocar o algo entre ellas, con un poco de suerte se rasgaban la ropa o algo entre tantos tropezones o alguna de las gallinas hacía el trabajo sucio al intentar escaparse.
—Cinco contra tres… Creo que vas un poco atrasada. —Soltó burlona a su compañera aun esperando de pie frente al gallinero.
Si las cosas seguían así llegarían a una cifra que marcaría la victoria de Ritsuko y Noemi claro, no podría ni quejarse al respecto puesto que fue ella la que vino con la apuesta.