18/08/2016, 16:54
Ante la incertidumbre de no saber que hacer el Takanashi se resignó a suspirar mientras veía como el chico se dedicaba a buscar algo con la mirada. Se quedó intrigado pues no sabía que era lo que planeaba el Amegakuriense, pero pronto lo descubrió al ver como tomaba una botella de sake para luego grabar algo en ella con algún método desconocido. El chico de la sudadera se la entregó aunque lo que estaba escrito en ella no era para nada agradable.
"No me importa, no son mis problemas"
Al de ojos dispares le da bastante igual que le manden al demonio, está más que acostumbrado, pero lo que si le incomoda es que la gente sea descortés. Entendía bien el mensaje, probablemente el otro chicho quería estar solo, pero Tatsuya creía que si tanto lo deseaba se lo pudo haber dicho en otro tono y él no era de los que tenían pelos en la lengua, se lo echaría en cara sin remordimiento alguno.
—Si lo que querías era que me fuera pues me iré, pero no hacía falta ofende... ¡Chh!— Se cortó a media frase tapándose la boca por culpa del estornudo, aunque tampoco era como que tuviera mucho que decirle —Gracias de todas formas, con permiso— Reverenció por puro protocolo, se dió media vuelta y se dispuso a seguir vagado por la costa.
No le iba a discutir por una nimiedad, pero al no encontrar ayuda por parte del mudo pues tendría que buscar a alguien más o simplemente dar vueltas hasta llegar al pueblo.
"Tengo que resguardarme en algún sitio antes de que me de una pulmonía"
"No me importa, no son mis problemas"
Al de ojos dispares le da bastante igual que le manden al demonio, está más que acostumbrado, pero lo que si le incomoda es que la gente sea descortés. Entendía bien el mensaje, probablemente el otro chicho quería estar solo, pero Tatsuya creía que si tanto lo deseaba se lo pudo haber dicho en otro tono y él no era de los que tenían pelos en la lengua, se lo echaría en cara sin remordimiento alguno.
—Si lo que querías era que me fuera pues me iré, pero no hacía falta ofende... ¡Chh!— Se cortó a media frase tapándose la boca por culpa del estornudo, aunque tampoco era como que tuviera mucho que decirle —Gracias de todas formas, con permiso— Reverenció por puro protocolo, se dió media vuelta y se dispuso a seguir vagado por la costa.
No le iba a discutir por una nimiedad, pero al no encontrar ayuda por parte del mudo pues tendría que buscar a alguien más o simplemente dar vueltas hasta llegar al pueblo.
"Tengo que resguardarme en algún sitio antes de que me de una pulmonía"