23/10/2016, 02:45
En mitad de la charla, el chico de orbes tan claros y blancos como la misma nieve hizo un gesto un tanto singular, aferrándose al puff mientras flanqueaba el cuerpo en pos de ver la hora en un reloj que colgaba de la pared. Ni un acróbata lo hubiese podido hacer más difícil. Pero sin duda, logró ver la hora que tenían. Rápidamente, pareció recordar algo, o simplemente cayó en cuenta de cierto asunto... Fuera como fuera, las prisas se aferraron a él.
El chico se puso en pié rápidamente, y tomó un panfleto de su bolso. Tras ello, se despidió cordialmente de ambas chicas, así como agradeció la hospitalidad de la hija del astro rey. Ésta devolvió la reverencia, con una clara sonrisa. —No hay de qué. Vuelve cuando quieras, casi seguro estaré por aquí.
«Espero que no se lo tome al pié de la letra...»
Por su parte, Himoki compartió su agrado con el chico, y remarcó que al igual que a la Sarutobi podía encontrarla en ese local, a ella la encontraría en la biblioteca. El chico agregó que no dudaría en pasarse por la biblioteca, quizás un nuevo romance había comenzado después de todo. O simplemente le quería agradecer el favor de forma un poco mas... personal.
—Hasta la próxima, Hazegawa.
Con las mismas, le propinó un último trago a su copa, y la reposó sobre la mesa. La verdad, casi le había caído bien, aunque el comienzo había sido un completo desastre...
El chico se puso en pié rápidamente, y tomó un panfleto de su bolso. Tras ello, se despidió cordialmente de ambas chicas, así como agradeció la hospitalidad de la hija del astro rey. Ésta devolvió la reverencia, con una clara sonrisa. —No hay de qué. Vuelve cuando quieras, casi seguro estaré por aquí.
«Espero que no se lo tome al pié de la letra...»
Por su parte, Himoki compartió su agrado con el chico, y remarcó que al igual que a la Sarutobi podía encontrarla en ese local, a ella la encontraría en la biblioteca. El chico agregó que no dudaría en pasarse por la biblioteca, quizás un nuevo romance había comenzado después de todo. O simplemente le quería agradecer el favor de forma un poco mas... personal.
—Hasta la próxima, Hazegawa.
Con las mismas, le propinó un último trago a su copa, y la reposó sobre la mesa. La verdad, casi le había caído bien, aunque el comienzo había sido un completo desastre...