19/12/2016, 19:53
Estaba a un par de pasos de la puerta de salida para cuando la voz del empleado le llamó la atención una vez más.
—¿Sí…? —Respondió a la vez que se volteaba a ver al secretario y que un anciano gritó.
Probablemente sus palabras se hayan perdido por culpa del hombre con el bastón, pero no podía culparle ya que ella se había tomado su tiempo, aunque lo que vino después fue cuanto menos curioso. ~¿O sea que tengo que callarme si me hace algo…? ~Se preguntó a si misma sin saber cómo debía de interpretar aquellas palabras.
De cualquier manera, por cómo estaban metiendo prisas al pobre hombre prefirió no darle más charla y tras un gesto de cabeza acompañado de una cordial sonrisa la rubia se retiró del recinto rumbo a la casa de la tal Tamako.
—Dos calles dijo… —Susurró a sí misma mientras caminaba despreocupadamente.
Era poca la distancia que tenía que recorrer y por suerte no cargaba con todas sus armas porque realmente, no tenía sentido hacerlo en medio de la aldea y más siendo una simple genin. ~¿Qué tanto problema puede dar un vallado…? ~Pensaba mientras avanzaba hasta que al fin localizó la dichosa oveja, cosa que realmente se pensó sería algún tipo de exageración o algo por el estilo pero allí estaba… Solo tenía que pasar por el jardín y llamar a la puerta… Nada del otro mundo, no había riesgo real, ¿verdad…?
—¿Sí…? —Respondió a la vez que se volteaba a ver al secretario y que un anciano gritó.
Probablemente sus palabras se hayan perdido por culpa del hombre con el bastón, pero no podía culparle ya que ella se había tomado su tiempo, aunque lo que vino después fue cuanto menos curioso. ~¿O sea que tengo que callarme si me hace algo…? ~Se preguntó a si misma sin saber cómo debía de interpretar aquellas palabras.
De cualquier manera, por cómo estaban metiendo prisas al pobre hombre prefirió no darle más charla y tras un gesto de cabeza acompañado de una cordial sonrisa la rubia se retiró del recinto rumbo a la casa de la tal Tamako.
—Dos calles dijo… —Susurró a sí misma mientras caminaba despreocupadamente.
Era poca la distancia que tenía que recorrer y por suerte no cargaba con todas sus armas porque realmente, no tenía sentido hacerlo en medio de la aldea y más siendo una simple genin. ~¿Qué tanto problema puede dar un vallado…? ~Pensaba mientras avanzaba hasta que al fin localizó la dichosa oveja, cosa que realmente se pensó sería algún tipo de exageración o algo por el estilo pero allí estaba… Solo tenía que pasar por el jardín y llamar a la puerta… Nada del otro mundo, no había riesgo real, ¿verdad…?