24/01/2017, 02:24
-No sé… Retenerlo por lo menos, era lo más justo, podríamos haberlo llevado a la policía, qué se yo…- Respondí brevemente dando a entender mi desacuerdo con la decisión que tomó el ojiblanco.
Seguimos caminando, no obstante me di cuenta que variamos ligeramente el rumbo y era justo y necesario para ambos, comer algo más que unas piezas de pollo agridulce, el desayuno era la comida principal del día y nosotros y apenas habíamos ingerido algo. -¿La llevarás a un lugar especial?- Cuestioné, si yo tuviera una cita buscaría un lugar para estar sólo los dos, algo íntimo, o eso pensaba, lo que cierto era que estaba lejos de tener una cita.
-No, no se me pasó la mano.- Bufé. -Así lo piensa dos veces la próxima vez que se le ocurra hacer algo así.- Mencioné como sí aquello hubiera sido una buena idea, pero quién sabe, a lo mejor saldría hasta por las noticias.
Finalmente entré a la tienda de ramen y me senté en el puesto de siempre, el cual estaba a la izquierda de Haze.-Buenos días!- Exclamé con euforía. -Yo quiero…- Le quité el menú a mi hermano de las manos y busqué rápidamente entre las opciones. Sí, un tazón especial de ramen del tamaño extra grande.- Hice un ademán con mis brazos, uniendo mis manos haciendo una circunferencia gigantesca, haciendo referencia a que así podría ser el tazón.
-Jajaja.- Me reí de mis estupideces. -Y un jugo de mora.- Terminé mi orden.
-Por cierto, ¿Cómo va el entrenamiento con Dayuu-sensei?
Seguimos caminando, no obstante me di cuenta que variamos ligeramente el rumbo y era justo y necesario para ambos, comer algo más que unas piezas de pollo agridulce, el desayuno era la comida principal del día y nosotros y apenas habíamos ingerido algo. -¿La llevarás a un lugar especial?- Cuestioné, si yo tuviera una cita buscaría un lugar para estar sólo los dos, algo íntimo, o eso pensaba, lo que cierto era que estaba lejos de tener una cita.
-No, no se me pasó la mano.- Bufé. -Así lo piensa dos veces la próxima vez que se le ocurra hacer algo así.- Mencioné como sí aquello hubiera sido una buena idea, pero quién sabe, a lo mejor saldría hasta por las noticias.
Finalmente entré a la tienda de ramen y me senté en el puesto de siempre, el cual estaba a la izquierda de Haze.-Buenos días!- Exclamé con euforía. -Yo quiero…- Le quité el menú a mi hermano de las manos y busqué rápidamente entre las opciones. Sí, un tazón especial de ramen del tamaño extra grande.- Hice un ademán con mis brazos, uniendo mis manos haciendo una circunferencia gigantesca, haciendo referencia a que así podría ser el tazón.
-Jajaja.- Me reí de mis estupideces. -Y un jugo de mora.- Terminé mi orden.
-Por cierto, ¿Cómo va el entrenamiento con Dayuu-sensei?