2/08/2017, 16:20
Aquella paloma, definitivamente estaba algo desorientada, no sabía muy bien que hacía allí y mucho menos que hacía el peliblanco acuclillado delante suya tratando de agarrarla, por lo que, sin pensarlo mucho, dio un par de saltitos colocándose encima del inodoro, sucio como el resto, y rápidamente alzo el vuelo tratando de salir por la misma ventana por la que había entrado, al fin y al cabo era la única que había.
El animal no debía de ser muy diestro con el vuelo todavía, pues calculó mal y terminó estampándose en el techo, provocando una ligera risa en el genin. El pájaro, se quedó tumbado, como conmocionado, sobre el pie del Senju que rápidamente trató de ayudar al pobre animal.
— Venga vamos que te ayu... — Pero se vio frenado cuando escuchó como la paloma tenía una especie de arcada y, seguidamente, vomitaba en su pie. — ¡VENGA HOMBRE! ¡ESTO ES UNA BROMA YA! — Y, como si nada hubiera pasado, el pájaro echó a volar, saliendo esta vez del baño por la ventana.
El peliblanco se quedó allí unos instantes, parado, pensando en lo que acababa de pensar y tratando de averiguar que había hecho que fuera tan malo como para merecer aquello y, una vez llegó a la conclusión de que todo aquello no era más que una misión que tenía que cumplir y ya está, volvió sobre sus pasos, y, quitándose la sandalia que la paloma había vomitado, la limpió lo mejor que pudo, aguantando a la pata coja para no pisar aquel suelo de mierda.
— A ver qué más me pasa hoy... — Resopló el muchacho una vez había limpiado la sandalia y su pie, y se disponía a continuar con su trabajo de limpiador.
El animal no debía de ser muy diestro con el vuelo todavía, pues calculó mal y terminó estampándose en el techo, provocando una ligera risa en el genin. El pájaro, se quedó tumbado, como conmocionado, sobre el pie del Senju que rápidamente trató de ayudar al pobre animal.
— Venga vamos que te ayu... — Pero se vio frenado cuando escuchó como la paloma tenía una especie de arcada y, seguidamente, vomitaba en su pie. — ¡VENGA HOMBRE! ¡ESTO ES UNA BROMA YA! — Y, como si nada hubiera pasado, el pájaro echó a volar, saliendo esta vez del baño por la ventana.
El peliblanco se quedó allí unos instantes, parado, pensando en lo que acababa de pensar y tratando de averiguar que había hecho que fuera tan malo como para merecer aquello y, una vez llegó a la conclusión de que todo aquello no era más que una misión que tenía que cumplir y ya está, volvió sobre sus pasos, y, quitándose la sandalia que la paloma había vomitado, la limpió lo mejor que pudo, aguantando a la pata coja para no pisar aquel suelo de mierda.
— A ver qué más me pasa hoy... — Resopló el muchacho una vez había limpiado la sandalia y su pie, y se disponía a continuar con su trabajo de limpiador.
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»