5/08/2017, 12:03
Ante el trato que estaba recibiendo Juro — y probablemente también tendría que ver el que estaba recibiendo ella misma — Aiko explotó, dejando con la boca abierta al vendedor.
—¿Usted cree que esa es manera de tratar a un posible cliente?Por mucho que me camele, si trata de esa manera a un amigo, y delante mía, conmigo vas apañado. Ya puedes continuar el camino, no estamos interesados en comprarle nada.
— N-No, s-señorita — exclamó el vendedor, completamente aterrado.
»Adiós.
Así pues, Aiko le hizo el completo vacío al vendedor, a pesar de sus suplicas y sus llantos. Juro se volvió hacia ella y le escuchó, gratamente sorprendido.
« Otra vez alguien me tiene que defender... »
Justamente cuando Aiko comenzó a hablar, el vendedor guardó silencio. Ninguno de los dos le prestó atención de hecho.
—Bueno, como te comentaba antes... aunque mis amigos sufran artrosis, antes de eso llegarán a una edad en la que yo debería estar, y sin embargo no... es un tema delicado en realidad, no es tan fácil como parece. En realidad, ya le di mas de mil y una vuelta al asunto...
— Tienes razón. Entiendo el problema. Ni si quiera un buen maquillaje puede simular eso — murmuró, pensativo —. Lo único que se me ocurre es que deberías rodearte de gente de confianza, que sepan tu secreto y no se extrañen. La gente también suele ser muy supersticiosa. No creo que nadie te haga nada, pero tener gente de tu lado te ayudaría.
» Al final no tendrás más remedio que hablar con tu Kage seriamente. Si pudierais llegar a un acuerdo, contar con su protección...
Cuando Juro paró, no supo que más decir. Era un tema demasiado complicado para un niño como él.
El vendedor ambulante no se había marchado, aunque había retrocedido hasta el carromato. Había estado en silencio, con miedo a interrumpir. Solo se atrevería a hablar cuando hubiesen acabado.
Y cuando se dice hablar, se dice sollozar y arrodillarse.
— P-Por favor. Se lo ruego. Al menos mire mis productos — hablaba estridentemente. Tenía la cara enrojecida —, he recorrido un largo camino hasta aqui. ¿El niño es el problema? ¡Lo trataré bien! Tengo un problema con ellos, entiende. Unos niños tiraron mi carretilla hace unas semanas y me apedrearon. Desde entonces, no puedo evitar tenerles asco.
» Tiene un problema, ¿verdad? Estoy seguro de que podría ayudarle con su problema. Por favor, por favor — exclamó, acercandose un poco. Después, miró a Juro, dandole pena — Perdoname, amiguito.
—¿Usted cree que esa es manera de tratar a un posible cliente?Por mucho que me camele, si trata de esa manera a un amigo, y delante mía, conmigo vas apañado. Ya puedes continuar el camino, no estamos interesados en comprarle nada.
— N-No, s-señorita — exclamó el vendedor, completamente aterrado.
»Adiós.
Así pues, Aiko le hizo el completo vacío al vendedor, a pesar de sus suplicas y sus llantos. Juro se volvió hacia ella y le escuchó, gratamente sorprendido.
« Otra vez alguien me tiene que defender... »
Justamente cuando Aiko comenzó a hablar, el vendedor guardó silencio. Ninguno de los dos le prestó atención de hecho.
—Bueno, como te comentaba antes... aunque mis amigos sufran artrosis, antes de eso llegarán a una edad en la que yo debería estar, y sin embargo no... es un tema delicado en realidad, no es tan fácil como parece. En realidad, ya le di mas de mil y una vuelta al asunto...
— Tienes razón. Entiendo el problema. Ni si quiera un buen maquillaje puede simular eso — murmuró, pensativo —. Lo único que se me ocurre es que deberías rodearte de gente de confianza, que sepan tu secreto y no se extrañen. La gente también suele ser muy supersticiosa. No creo que nadie te haga nada, pero tener gente de tu lado te ayudaría.
» Al final no tendrás más remedio que hablar con tu Kage seriamente. Si pudierais llegar a un acuerdo, contar con su protección...
Cuando Juro paró, no supo que más decir. Era un tema demasiado complicado para un niño como él.
El vendedor ambulante no se había marchado, aunque había retrocedido hasta el carromato. Había estado en silencio, con miedo a interrumpir. Solo se atrevería a hablar cuando hubiesen acabado.
Y cuando se dice hablar, se dice sollozar y arrodillarse.
— P-Por favor. Se lo ruego. Al menos mire mis productos — hablaba estridentemente. Tenía la cara enrojecida —, he recorrido un largo camino hasta aqui. ¿El niño es el problema? ¡Lo trataré bien! Tengo un problema con ellos, entiende. Unos niños tiraron mi carretilla hace unas semanas y me apedrearon. Desde entonces, no puedo evitar tenerles asco.
» Tiene un problema, ¿verdad? Estoy seguro de que podría ayudarle con su problema. Por favor, por favor — exclamó, acercandose un poco. Después, miró a Juro, dandole pena — Perdoname, amiguito.
Hablo / Pienso
Avatar hecho por la increible Eri-sama.
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Sellos implantados: Hermandad intrepida
- Juro y Datsue : Aliento nevado, 218. Poder:60