19/08/2017, 00:02
Tras una extensa caminata que conllevo varias paradas y varias acampadas al aire libre, el verano caia sobre aquel par de desgraciados que recorrian el camino, acostumbrados a tener la lluvia sobre sus hombros, se sentian extraños al estar lejos de su patria y mas extraños e incomodos al tener aquel calor que ambos individuos calificaban de horrible.
—Creo que estamos cerca, un par de horas mas de camino y habremos llegado. — Dijo con cierto tono de esperanza, como si aquello fuese el oasis en mitad del desierto, la joven de cabellos oscuros largos hasta la cintura y complexion delgada, de piel blanquecina ahora un poco tostada por el sol.
— Dijiste lo mismo anoche, y hace un par de dias…— Expreso Haze, entrecerrando los ojos mientras miraba a la femina a su lado, por suerte llevaba un atuendo bastante ligero para viajes a aquellas regiones que calificaba de infernales, aunque la mochila que llevaba no era nada ligera en comparacion con la ropa que tenia encima.—No tenia idea de que era taaan lejos, de haber revisado el mapa yo mismo, me hubiese negado…— Se quejo frunciendo el cejo,Haze estaba cansado y acalorado, lo cual aumentaba su irritabilidad.
—Keisuke Prometio que me acompañarias…—Dijo recobrando el animo, tomando la delantera alcanzando a vislumbrar a pocos metros el letrero que les daba la bienvenida, y las decoraciones de lo que parecia una festividad en toda la entrada al pueblo.
—Maldito seas Keisuke…Te torturare cuando vuelva— Fue lo que alcanzo a pensar, antes de ver la entrada al pueblo, nada mas al entrar fue testigo de la herencia trabajadora del pueblo, mientras ambos se adentraban en el mismo, observaron los mercadillos de viveres en su mayoria hortalizas y productos artesanales.
— Quizas deba llevarle algo a Chiho…seria un buen detalle— Maquino la mente de Haze mientras se acercaba a uno de los puestos que rodeaban la plaza del pueblo, se acerco sonriente a un collar con un tallado de madera que le llamo la atencion,se le escapo una mueca al verle el precio y al revisar su bolsillo, la relacion le parecio desventajosa y se alejo lentamente. — Nahima-chan, espero encontremos a la Abuela Tedaya pronto…— Dijo tratando de disimular la retirada.
—La Carta mencionaba a este pueblo, deberiamos descansar un poco antes de comenzar a buscarla…— Dijo, echando mano a su bolsillo y sacando un papelillo que extendio hasta estar completo, mientras leia camino hacia los banquillos de la plaza, ignorando al sujeto que estaba sentado a un lado, tomo asiento. —Es extraño…solo dice ‘’Aldea Minori’’, no especifica sitio…—Aquellas palabras fueron fatales para el ojiblanco, el cual no pudo evitar llevarse la mano a la cara.
— Ya estamos aquí, tocara buscarla…— El ojiblanco le arrebato el papel de las manos a la femina y comenzo a caminar en circulos frente al banquillo, leyendo y releyendo aquella carta. — No hay de otra, habra que preguntar a los locales—Expreso soltando un suspiro— Disculpe…¿usted conoce a la Abuela Tedaya? —Pregunto al joven que yacia sentado al lado de Nahima.
—Creo que estamos cerca, un par de horas mas de camino y habremos llegado. — Dijo con cierto tono de esperanza, como si aquello fuese el oasis en mitad del desierto, la joven de cabellos oscuros largos hasta la cintura y complexion delgada, de piel blanquecina ahora un poco tostada por el sol.
— Dijiste lo mismo anoche, y hace un par de dias…— Expreso Haze, entrecerrando los ojos mientras miraba a la femina a su lado, por suerte llevaba un atuendo bastante ligero para viajes a aquellas regiones que calificaba de infernales, aunque la mochila que llevaba no era nada ligera en comparacion con la ropa que tenia encima.—No tenia idea de que era taaan lejos, de haber revisado el mapa yo mismo, me hubiese negado…— Se quejo frunciendo el cejo,Haze estaba cansado y acalorado, lo cual aumentaba su irritabilidad.
—Keisuke Prometio que me acompañarias…—Dijo recobrando el animo, tomando la delantera alcanzando a vislumbrar a pocos metros el letrero que les daba la bienvenida, y las decoraciones de lo que parecia una festividad en toda la entrada al pueblo.
—Maldito seas Keisuke…Te torturare cuando vuelva— Fue lo que alcanzo a pensar, antes de ver la entrada al pueblo, nada mas al entrar fue testigo de la herencia trabajadora del pueblo, mientras ambos se adentraban en el mismo, observaron los mercadillos de viveres en su mayoria hortalizas y productos artesanales.
— Quizas deba llevarle algo a Chiho…seria un buen detalle— Maquino la mente de Haze mientras se acercaba a uno de los puestos que rodeaban la plaza del pueblo, se acerco sonriente a un collar con un tallado de madera que le llamo la atencion,se le escapo una mueca al verle el precio y al revisar su bolsillo, la relacion le parecio desventajosa y se alejo lentamente. — Nahima-chan, espero encontremos a la Abuela Tedaya pronto…— Dijo tratando de disimular la retirada.
—La Carta mencionaba a este pueblo, deberiamos descansar un poco antes de comenzar a buscarla…— Dijo, echando mano a su bolsillo y sacando un papelillo que extendio hasta estar completo, mientras leia camino hacia los banquillos de la plaza, ignorando al sujeto que estaba sentado a un lado, tomo asiento. —Es extraño…solo dice ‘’Aldea Minori’’, no especifica sitio…—Aquellas palabras fueron fatales para el ojiblanco, el cual no pudo evitar llevarse la mano a la cara.
— Ya estamos aquí, tocara buscarla…— El ojiblanco le arrebato el papel de las manos a la femina y comenzo a caminar en circulos frente al banquillo, leyendo y releyendo aquella carta. — No hay de otra, habra que preguntar a los locales—Expreso soltando un suspiro— Disculpe…¿usted conoce a la Abuela Tedaya? —Pregunto al joven que yacia sentado al lado de Nahima.