23/08/2017, 17:56
(Última modificación: 23/08/2017, 18:02 por Aotsuki Ayame.)
El dolor del impacto que había sufrido antes seguía ahí, pero la energía volvía a revitalizar su cuerpo como un torrente de vida que circulaba por cada una de sus células. Pero su oponente tampoco se rendía. Pese al agotamiento físico, el combate seguiría hasta que uno de los dos cayera. Y ahí estaba de nuevo, reincorporándose para volver a la carga después de haber sido derribado por aquel torrente.
Comenzó a avanzar hacia ella, poco a poco, antes de acelerar. Pero antes de que pudiera hacer nada, Ayame se abalanzó hacia delante, aupada por esa nueva fuerza que la llenaba. Estiró su mano derecha, y un kunai apareció en su palma. Con un simple movimiento de muñeca, la kunoichi llenó de chakra el filo del kunai e hizo que los rayos del sol incidieran sobre él y se reflejaran en los ojos de su oponente para cegarlo momentáneamente.
Para cuando volviera a recobrar el sentido de la visión, no vería a una Ayame, sino a tres que se movían zigzagueando entre sí para confundirle y se abalanzaban sobre él con un puño hacia la mandíbula, una patada hacia el abdomen y un barrido hacia sus piernas.
PV:–
CK:– –
Comenzó a avanzar hacia ella, poco a poco, antes de acelerar. Pero antes de que pudiera hacer nada, Ayame se abalanzó hacia delante, aupada por esa nueva fuerza que la llenaba. Estiró su mano derecha, y un kunai apareció en su palma. Con un simple movimiento de muñeca, la kunoichi llenó de chakra el filo del kunai e hizo que los rayos del sol incidieran sobre él y se reflejaran en los ojos de su oponente para cegarlo momentáneamente.
Para cuando volviera a recobrar el sentido de la visión, no vería a una Ayame, sino a tres que se movían zigzagueando entre sí para confundirle y se abalanzaban sobre él con un puño hacia la mandíbula, una patada hacia el abdomen y un barrido hacia sus piernas.
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94/150
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18/120
95/100
-5 CK
–1 AOs
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