13/09/2017, 13:21
Kimi se mantuvo esperando en el mismo lugar, apoyando el peso de su cuerpo de una pierna a otra y explorando el lugar con la mirada con curiosidad, hasta que apareció un anciano, muy bien musculado para su edad y con una sonrisa en el rostro, que cambió a una expresión de seriedad en cuanto oyó las palabras de la chica.
—Primero de todo, buenos días jovencita. —Dijo el anciano en señal de reproche por su falta de educación—. Primero de todo, necesitaré su nombre completo y rango para poder asignarle una misión oficial.
— Claro, Kuroyama Kimi, genin de Kusa.
Dijo de manera tranquila, abriendo un poco los ojos en señal de sorpresa por la musculatura del encargado.
—Primero de todo, buenos días jovencita. —Dijo el anciano en señal de reproche por su falta de educación—. Primero de todo, necesitaré su nombre completo y rango para poder asignarle una misión oficial.
— Claro, Kuroyama Kimi, genin de Kusa.
Dijo de manera tranquila, abriendo un poco los ojos en señal de sorpresa por la musculatura del encargado.