23/07/2015, 23:51
Den nació los primeros día de invierno del 186 en Kusagakure, sus padres fueron habidos shinobis los cuales solían ausentarse durante largo tiempo por misiones de la aldea, por lo que Den fue criado por su abuelo Hayato. La familia de Den esta distancia de las otras ramas de los Hyuga por decisión de su abuelo hace muchos años atrás ya que era el menor de 4 hermanos y en su posición era el que recibía peor trato en la familia por lo que se distancio de las demás ramas.
—Ojisan, ¿Cuál es el significado de shinobi?—
—Shinobi… esa palabra me ha definido desde que tengo memoria. Siempre teniendo muy en claro mis objetivos, siempre fiel a mi hogar… ¿pero qué significado tenía esa palabra? Varias veces me había preguntado lo mismo a tu edad, sin llegar a una respuesta convincente de ello.—
Hayato podía notar la desilusión en la cara de su nieto Den y eso era algo que no podía soportar, no desde que su propio hijo y su nuera cayeron en misión.
—Shinobi, es una palabra que encierra un millón de significados, pero el significado que me ha parecido más acertado a lo largo de los años es… son aquellos ninjas protectores de la aldea, los que llevan a cabo las misiones que proporcionan estabilidad a la aldea, son quienes combaten a los villanos y reciben elogios si caen en un honroso combate al igual que tus padres— Tal vez Hayato podría de haber suavizado esas últimas palabras pero buscaba que su nieto sepa la realidad de la vida de los shinobis.
—Yo también me convertiré en shinobi, me convertiré en protector de la aldea— Decía Den bastante convencido de ello.
—Lo sé, lo harás bastante bien eres un Hyuga— La forma de hablar de Hayato había cambiado se le notaba feliz por la decisión de su nieto — La mayoría de las historias que me contaba mi padre, eran de hace muchas generaciones atrás en la época en que la familia Hyuga eran reconocidas alrededor del mundo. Nuestro clan ha dado ha dado shinobis excelentes a las aldea desde aquellos tiempos, la época dorada de los Hyugas, cuando éramos la uno los clanes más fuerte de Konoha… como desearía haber pertenecido a esa época— La felicidad de Hayato había terminado rápidamente de forma melancólica con una mirada al vacío.
—No te preocupes ojisan, me convertiré en el shinobi más poderoso de Kusagakure, venceré a los enemigos de la aldea y luego traeré una nueva época de oro para los Hyuga—
A Hayato le agradaba el optimismo de su nieto y siempre intentaba animarlo cada vez más, pero sin crear alguna falsa esperanza en él, al final y al cabo motivarlo de alguna manera pero sabiendo que su camino no sería fácil. —Para convertirte en un shinobi de excelencia debe entrenar muy duro cada día… Den, siempre recuerda esto que te voy a decir, uno no nace destinado a ser un shinobi, uno se forja a sí mismo para serlo con mucho entrenamiento y dedicación—
Desde aquel día, siguiendo las palabras de su abuelo y bajo su tutela Den pasaría la mayor parte de los días venideros entrenando y aprendiendo todo lo posible hasta que llegara el día que pudiera unirse a la academia. El entrenamiento al que Den se sometió consistía principalmente del uso correcto Juken y del control del chakra que según su abuelo es la base de todo usuario del Byuakugan, el cual Den aprendió a dominar poco a poco. El entrenamiento de Juken y de lo básico que aprendió en Taijutsu lo ponía en práctica al menos 3 horas por día de cada estilo por lo que con el tiempo sus manos se verían bastante marcada por tantas horas de entrenamiento.
—Ojisan, ¿Cuál es el significado de shinobi?—
—Shinobi… esa palabra me ha definido desde que tengo memoria. Siempre teniendo muy en claro mis objetivos, siempre fiel a mi hogar… ¿pero qué significado tenía esa palabra? Varias veces me había preguntado lo mismo a tu edad, sin llegar a una respuesta convincente de ello.—
Hayato podía notar la desilusión en la cara de su nieto Den y eso era algo que no podía soportar, no desde que su propio hijo y su nuera cayeron en misión.
—Shinobi, es una palabra que encierra un millón de significados, pero el significado que me ha parecido más acertado a lo largo de los años es… son aquellos ninjas protectores de la aldea, los que llevan a cabo las misiones que proporcionan estabilidad a la aldea, son quienes combaten a los villanos y reciben elogios si caen en un honroso combate al igual que tus padres— Tal vez Hayato podría de haber suavizado esas últimas palabras pero buscaba que su nieto sepa la realidad de la vida de los shinobis.
—Yo también me convertiré en shinobi, me convertiré en protector de la aldea— Decía Den bastante convencido de ello.
—Lo sé, lo harás bastante bien eres un Hyuga— La forma de hablar de Hayato había cambiado se le notaba feliz por la decisión de su nieto — La mayoría de las historias que me contaba mi padre, eran de hace muchas generaciones atrás en la época en que la familia Hyuga eran reconocidas alrededor del mundo. Nuestro clan ha dado ha dado shinobis excelentes a las aldea desde aquellos tiempos, la época dorada de los Hyugas, cuando éramos la uno los clanes más fuerte de Konoha… como desearía haber pertenecido a esa época— La felicidad de Hayato había terminado rápidamente de forma melancólica con una mirada al vacío.
—No te preocupes ojisan, me convertiré en el shinobi más poderoso de Kusagakure, venceré a los enemigos de la aldea y luego traeré una nueva época de oro para los Hyuga—
A Hayato le agradaba el optimismo de su nieto y siempre intentaba animarlo cada vez más, pero sin crear alguna falsa esperanza en él, al final y al cabo motivarlo de alguna manera pero sabiendo que su camino no sería fácil. —Para convertirte en un shinobi de excelencia debe entrenar muy duro cada día… Den, siempre recuerda esto que te voy a decir, uno no nace destinado a ser un shinobi, uno se forja a sí mismo para serlo con mucho entrenamiento y dedicación—
Desde aquel día, siguiendo las palabras de su abuelo y bajo su tutela Den pasaría la mayor parte de los días venideros entrenando y aprendiendo todo lo posible hasta que llegara el día que pudiera unirse a la academia. El entrenamiento al que Den se sometió consistía principalmente del uso correcto Juken y del control del chakra que según su abuelo es la base de todo usuario del Byuakugan, el cual Den aprendió a dominar poco a poco. El entrenamiento de Juken y de lo básico que aprendió en Taijutsu lo ponía en práctica al menos 3 horas por día de cada estilo por lo que con el tiempo sus manos se verían bastante marcada por tantas horas de entrenamiento.