El chico había adelantado su caminar por delante de la kunoichi Amejin, ella siguió su camino por aquellas curiosas calles construidas de madera que conectaba toda aquella ciudad arbórea, en su andar notó Muchas miradas confusas, no era para menos puesto que era la única persona en toda Tane Shigai que andaba de pollera y medias largas, una Amejin con todas las letras estaba preparada para este clima, el cual es mucho más salvaje en su propio país.
De pronto le urgió beber algo, una infusión era la mejor de las opciones, por lo que ingresó en lo que parecía ser un local gastronómico
-Té blanco y una porción de pastel de fresa, por favor - pidió al mesero luego de elegir donde sentarse, como era usual en la kunoichi de cabellos dorados, su voz iba acompañada de respeto y buenos modales, no era Mogura claramente, pero conocía bien la etiqueta como para dirigirse correctamente a otra persona
De pronto le urgió beber algo, una infusión era la mejor de las opciones, por lo que ingresó en lo que parecía ser un local gastronómico
-Té blanco y una porción de pastel de fresa, por favor - pidió al mesero luego de elegir donde sentarse, como era usual en la kunoichi de cabellos dorados, su voz iba acompañada de respeto y buenos modales, no era Mogura claramente, pero conocía bien la etiqueta como para dirigirse correctamente a otra persona
Hablo - Pienso - Telepatía