9/12/2017, 20:24
Daruu escuchó atentamente la traducción de las palabras del cuervo.
—Si se lo quieres decir, y para que tú pierdas también la curiosidad que sin duda tendrás... —Siempre la tenían—. Es una característica de mi clan. Hasta ahí puedo leer.
»Ya de paso... ¿Por qué no satisfaces mi propia curiosidad? ¿Cómo es que eres capaz de hablar con los cuervos? ¿Cómo es que tienes un cuervo que puede hablar con los humanos? Había oído hablar de animales que hablaban con humanos, de las familias esas a las que puedes invocar. Pero nunca imaginé que encontraría lo contrario, un humano que pudiese hablar cuervo.
Se lo pensó un momento.
—Bueno, a decir verdad, con los animales tampoco me he cruzado. Eres la primera. —Se había dirigido, obviamente, a la cuervo de Reiji.
Todos siguieron comiendo durante un momento, aunque el cuervo que acompañaba a Daruu estaba esperando una respuesta y picoteaba sin ganas su trozo de pizza. Entonces, Reiji ofreció al cuervo que se disculpase para que pudieran ayudarle, y sugirió a Daruu pedirle una recompensa.
El cuervo miró a Daruu, y Daruu miró al cuervo. El pájaro se acercó dando un par de brincos y golpeó su mano con el pico. Fue un golpe suave.
—Bwark. (Lo siento).
—Venga, no soy capaz de pedirle ninguna recompensa si me mira de esa manera. —Daruu resopló y cogió otro trozo de pizza—. Terminaremos de comer, y buscaremos a tu ladrón.
—Si se lo quieres decir, y para que tú pierdas también la curiosidad que sin duda tendrás... —Siempre la tenían—. Es una característica de mi clan. Hasta ahí puedo leer.
»Ya de paso... ¿Por qué no satisfaces mi propia curiosidad? ¿Cómo es que eres capaz de hablar con los cuervos? ¿Cómo es que tienes un cuervo que puede hablar con los humanos? Había oído hablar de animales que hablaban con humanos, de las familias esas a las que puedes invocar. Pero nunca imaginé que encontraría lo contrario, un humano que pudiese hablar cuervo.
Se lo pensó un momento.
—Bueno, a decir verdad, con los animales tampoco me he cruzado. Eres la primera. —Se había dirigido, obviamente, a la cuervo de Reiji.
Todos siguieron comiendo durante un momento, aunque el cuervo que acompañaba a Daruu estaba esperando una respuesta y picoteaba sin ganas su trozo de pizza. Entonces, Reiji ofreció al cuervo que se disculpase para que pudieran ayudarle, y sugirió a Daruu pedirle una recompensa.
El cuervo miró a Daruu, y Daruu miró al cuervo. El pájaro se acercó dando un par de brincos y golpeó su mano con el pico. Fue un golpe suave.
—Bwark. (Lo siento).
—Venga, no soy capaz de pedirle ninguna recompensa si me mira de esa manera. —Daruu resopló y cogió otro trozo de pizza—. Terminaremos de comer, y buscaremos a tu ladrón.