13/12/2017, 17:12
El chico, tras llegar a la orilla, respondió de manera afirmativa a la pregunta. Así mismo, dio pie a que se fuesen, como si no tuviesen que esperar a nadie mas. El hombre miró alrededor, y no pudo evitar arquear una ceja tras volver la vista hacia Karamaru.
—¿Solo un shinobi? Me dijeron que serían dos, pero bueno... supongo que no importa.
El hombre encaminó su equino hacia el que quedaba libre, y obviamente amarró las riendas de éste a su propio corcel. Los tres caballos le pertenecían, era obvio que regresaría con los tres. Tras ello, aceleró el paso y adelantó no por mucho al pelado. El hombre era quien indicaría el camino, pues seguramente ninguno de los genin sabía donde se hallaba la ciudad que buscaban.
—Bueno, mi nombre es Tomohiro Kato. Supongo que te preguntarás a qué se debe tanto secretismo... es normal. Pero tenemos pocas respuestas que dar, por eso se trata de una incursión para recabar información. No se trata de una misión convencional, tan solo debes tomar toda la información que puedas para que sobre ésta, se proceda a organizar una misión. Ya estuve hablando con la administración de Amegakure, y ésta fue la única solución que han visto viable.
»Te llevaré hasta las puertas de Mokono, mi pueblo, que es el pueblo vecino de Nokoto. Desde allí ya deberás proceder tu mismo, intentando no levantar sospechas.
Entre tanto, el ritmo de los caballos sería progresivo, buscando casi el galope a últimas. Era obvio que ni corriendo la chica podría mantener las distancias, mucho menos aguantar el trecho hasta el pueblo.
—¿Solo un shinobi? Me dijeron que serían dos, pero bueno... supongo que no importa.
El hombre encaminó su equino hacia el que quedaba libre, y obviamente amarró las riendas de éste a su propio corcel. Los tres caballos le pertenecían, era obvio que regresaría con los tres. Tras ello, aceleró el paso y adelantó no por mucho al pelado. El hombre era quien indicaría el camino, pues seguramente ninguno de los genin sabía donde se hallaba la ciudad que buscaban.
—Bueno, mi nombre es Tomohiro Kato. Supongo que te preguntarás a qué se debe tanto secretismo... es normal. Pero tenemos pocas respuestas que dar, por eso se trata de una incursión para recabar información. No se trata de una misión convencional, tan solo debes tomar toda la información que puedas para que sobre ésta, se proceda a organizar una misión. Ya estuve hablando con la administración de Amegakure, y ésta fue la única solución que han visto viable.
»Te llevaré hasta las puertas de Mokono, mi pueblo, que es el pueblo vecino de Nokoto. Desde allí ya deberás proceder tu mismo, intentando no levantar sospechas.
Entre tanto, el ritmo de los caballos sería progresivo, buscando casi el galope a últimas. Era obvio que ni corriendo la chica podría mantener las distancias, mucho menos aguantar el trecho hasta el pueblo.