14/12/2017, 22:00
Ritsuko no indagó más en su pasado y vida personal. Interiorizó un suspiro de alivio, ya que él NO tenía una sola pizca de predisposición para hablar de ello. Con la efímera conversación condenada y enterrada, ambos se mantuvieron en silencio a lo largo del corto espacio de tiempo que la fémina necesitó para rematar la sopa.
Algo más tarde Ritsuko se sentó frente a él, haciendo uso de un lenguaje corporal que indicaba a gritos que se aburría. Ralexion se limitó a observarla con curiosidad, barajando la posibilidad de poner sobre la mesa un nuevo tema de conversación, mas su acompañante se le adelantó.
—¿El qué es aburrido? —preguntó con genuina curiosidad.
No había hilado el anterior objeto de charla con la pregunta de la pelirroja, lo que le llevó a no tener ni idea de porqué le preguntaba eso.
Algo más tarde Ritsuko se sentó frente a él, haciendo uso de un lenguaje corporal que indicaba a gritos que se aburría. Ralexion se limitó a observarla con curiosidad, barajando la posibilidad de poner sobre la mesa un nuevo tema de conversación, mas su acompañante se le adelantó.
—¿El qué es aburrido? —preguntó con genuina curiosidad.
No había hilado el anterior objeto de charla con la pregunta de la pelirroja, lo que le llevó a no tener ni idea de porqué le preguntaba eso.