14/12/2017, 22:18
El moreno depositó los dedos de su mano diestra sobre su mentón, adquiriendo un aspecto más pensativo. Las palabras de su colocutora llevaban peso y eran ciertas. Todo ello lo llevó a reflexionar sobre algo en lo que no había pensado desde que se instaló a la fuerza en Kusagakure: la soledad de un hogar para uno. Sí, él solía hablar con Samanosuke pero como cabía esperar el bonsai no le respondía. Ahora que se fijaba... sí, era aburrido y un poco deprimente.
—Tienes razón. Aunque yo más que aburrido lo llamaría desalentador —afirmó, sonriente—. Tener un poco de espacio solitario para uno está muy bien, pero estar siempre solo no es bueno. Y ahora que lo mencionas, saber que no hay nadie esperando por mí en casa es deprimente... aparte de Samanosuke, claro, pero él es un bonsai muy independiente.
Hizo en pos de bromear, deseoso de quitarle hierro al asunto y quizás arrancar una sonrija ajena.
—Tienes razón. Aunque yo más que aburrido lo llamaría desalentador —afirmó, sonriente—. Tener un poco de espacio solitario para uno está muy bien, pero estar siempre solo no es bueno. Y ahora que lo mencionas, saber que no hay nadie esperando por mí en casa es deprimente... aparte de Samanosuke, claro, pero él es un bonsai muy independiente.
Hizo en pos de bromear, deseoso de quitarle hierro al asunto y quizás arrancar una sonrija ajena.