4/01/2018, 19:58
Tardaron bastante poco en llegar al primer santuario, una suerte que los guías supieran orientarse perfectamente y no dependieran de la orientación de la pelirroja o de lo contrario todavía seguirían dentro de la aldea.
Tristemente, la lluvia ya los había calado a aquellos dos que no tenían abrigo y si a eso le sumamos el frío viento, era obvio que terminarían enfermando.
Así es como Ritsuko aparte de estar temblando de forma descontrolada, comenzó a moquear y estornudar como cualquiera con un resfriado que —al finalizar el día— probablemente empeoraría.
De cualquier manera, lo importante era reparar el santuario que estaba en pésimas condiciones, por no decir que ya ni siquiera se podía considerar como otra cosa que un montón de basura.
Ralexion se les adelantó y enlistó las tareas que tenían disponibles.
—¿No sería mejor reemplazar los tablones primero antes de intentar con el tejado —preguntó tímidamente a cierta distancia de sus compañeros.
El razonamiento de la kunoichi la hizo pensar en la posibilidad de que la estructura seguramente se derrumbaría si intentaban ponerse a reparar el tejado sin antes reemplazar los tablones podridos.
Tristemente, la lluvia ya los había calado a aquellos dos que no tenían abrigo y si a eso le sumamos el frío viento, era obvio que terminarían enfermando.
Así es como Ritsuko aparte de estar temblando de forma descontrolada, comenzó a moquear y estornudar como cualquiera con un resfriado que —al finalizar el día— probablemente empeoraría.
De cualquier manera, lo importante era reparar el santuario que estaba en pésimas condiciones, por no decir que ya ni siquiera se podía considerar como otra cosa que un montón de basura.
Ralexion se les adelantó y enlistó las tareas que tenían disponibles.
—¿No sería mejor reemplazar los tablones primero antes de intentar con el tejado —preguntó tímidamente a cierta distancia de sus compañeros.
El razonamiento de la kunoichi la hizo pensar en la posibilidad de que la estructura seguramente se derrumbaría si intentaban ponerse a reparar el tejado sin antes reemplazar los tablones podridos.