9/01/2018, 19:33
Los dos se asustaron, pero los dos recuperaron la compostura, aunque Ritsuko pronto volvió a perderla ante el miedo de haberse equivocado de camino el cual rápidamente fue confirmado por parte de su compañero, haciendo que la pelirroja cogiese una rabieta en la que simplemente se despeinó empleando ambas manos.
—¡Así no se puede! —se quejó a sí misma, ignorando que por su accionar ahora estaba completamente despeinada, haciendo parecer que llevaba meses sin tocar un peine.
Tan pronto como ella terminó con su pequeña rabieta, Ralexion volvió a hablar, esta vez cambiando radicalmente el tema, o no tanto porque era de suponerse que de algo quería hablar y si bien la pelirroja suspiró, no lo hizo porque el chico la molestara, más bien porque no le gustaba depender de otros a tal grado de no poder regresar a su casa.
—Sí, estoy libre —respondió volviendo a mostrarse melancólica como era ya costumbre—. ¿Puedes llevarme a casa después? —consultó poco después.
Seguramente terminen por buscarse un mejor lugar para hablar, y si la sacaban de ese punto exacto de la aldea volvería a irse en una dirección distinta de la que la llevaría a casa.
—¡Así no se puede! —se quejó a sí misma, ignorando que por su accionar ahora estaba completamente despeinada, haciendo parecer que llevaba meses sin tocar un peine.
Tan pronto como ella terminó con su pequeña rabieta, Ralexion volvió a hablar, esta vez cambiando radicalmente el tema, o no tanto porque era de suponerse que de algo quería hablar y si bien la pelirroja suspiró, no lo hizo porque el chico la molestara, más bien porque no le gustaba depender de otros a tal grado de no poder regresar a su casa.
—Sí, estoy libre —respondió volviendo a mostrarse melancólica como era ya costumbre—. ¿Puedes llevarme a casa después? —consultó poco después.
Seguramente terminen por buscarse un mejor lugar para hablar, y si la sacaban de ese punto exacto de la aldea volvería a irse en una dirección distinta de la que la llevaría a casa.