28/01/2018, 17:32
—Genial, vamos.
Ralexion aceleró el paso. Cuanto antes pidiesen antes se cocinarían los fideos y antes comerían. La meta era lo último, el llenarse el estómago, algo que el Uchiha necesitaba cada vez con más urgencia. Ya casi podía saborear el ramen.
Se percató de la presencia de la mujer en el interior del carro cuando se encontró a la distancia mínima para hacerlo. Acto seguido se personó y apoyó sobre el mostrador.
—¡Muy buenas! —empezó saludando, ya que a pesar del hambre aún conservaba sus modales— A mi compañera y a mí nos gustaría un buen tazón de ramen. ¡Uno de ternera picante para mí! ¿Tú qué quieres, Ritsuko?
Giró el rostro para dirigirlo hacia la pelirroja. Ahora era su momento de hacer un pedido.
Ralexion aceleró el paso. Cuanto antes pidiesen antes se cocinarían los fideos y antes comerían. La meta era lo último, el llenarse el estómago, algo que el Uchiha necesitaba cada vez con más urgencia. Ya casi podía saborear el ramen.
Se percató de la presencia de la mujer en el interior del carro cuando se encontró a la distancia mínima para hacerlo. Acto seguido se personó y apoyó sobre el mostrador.
—¡Muy buenas! —empezó saludando, ya que a pesar del hambre aún conservaba sus modales— A mi compañera y a mí nos gustaría un buen tazón de ramen. ¡Uno de ternera picante para mí! ¿Tú qué quieres, Ritsuko?
Giró el rostro para dirigirlo hacia la pelirroja. Ahora era su momento de hacer un pedido.