30/01/2018, 00:40
La situación mejoraba por momentos, ¿algo de lo que alegrarse o un motivo por el que temer un giro del destino aún peor? Por el momento el Uchiha prefirió tomar lo primero. La comida, la temperatura e incluso su estado físico colaboraron para devolverle un brío arrebatado por la lluvia y el resfriado. «¡Así sí! ¡Terminemos con esto!».
Incluso el siguiente santuario mostraba un aspecto más esperanzador que el imaginado en las mejores esperanzas del genin. Este solo había sufrido unas pintadas que expresaban con claridad un punto de vista inesperadamente literato; incluso la caligrafía era excelente. El adolescente, poco religioso por naturaleza, estaba completamente de acuerdo con esas afirmaciones, pero no podía aceptar la profanación de los templos independientemente del motivo.
—Vamos a ello, Ritsuko, ¡solo dos más!
En esta ocasión Ralexion también trabajaría, que ya iba siendo hora. Abrió la primera lata de pintura y comprobó que contenía un tono adecuado para restaurar las paredes laterales. Echó mano de un pincel y se puso manos a la obra, pintando la madera con esmero.
Incluso el siguiente santuario mostraba un aspecto más esperanzador que el imaginado en las mejores esperanzas del genin. Este solo había sufrido unas pintadas que expresaban con claridad un punto de vista inesperadamente literato; incluso la caligrafía era excelente. El adolescente, poco religioso por naturaleza, estaba completamente de acuerdo con esas afirmaciones, pero no podía aceptar la profanación de los templos independientemente del motivo.
—Vamos a ello, Ritsuko, ¡solo dos más!
En esta ocasión Ralexion también trabajaría, que ya iba siendo hora. Abrió la primera lata de pintura y comprobó que contenía un tono adecuado para restaurar las paredes laterales. Echó mano de un pincel y se puso manos a la obra, pintando la madera con esmero.