30/01/2018, 20:08
Luego de un rato de caminar, los shinobis llegaron al tercer santuario que al parecer lo único que necesitaba era una mano de pintura y ya. Trabajo sencillo y que podrían terminar bastante rápido si no se ponían a tontear.
En cuanto a lo que los textos ponía, literalmente le daba lo mismo, los leyó, los entendió, pero no le importaban en lo más mínimo así que simplemente tomaría el balde que Ralexion dejó y se lo llevaría junto a un pincel para pintar lo demás.
En cuanto a lo que los textos ponía, literalmente le daba lo mismo, los leyó, los entendió, pero no le importaban en lo más mínimo así que simplemente tomaría el balde que Ralexion dejó y se lo llevaría junto a un pincel para pintar lo demás.