2/02/2018, 14:36
(Última modificación: 2/02/2018, 14:37 por Eikyuu Juro.)
Juro se apartó a un lado, observando como sus palabras no hacían mella en el escudo impenetrable que Jin parecía haber creado en contra suya.
Ni si quiera le dejó contestar. Por supuesto que no le dejó contestar. Juro tenía argumentos, de hecho. Podía deducir que el momento en que Jin se había sentido abandonado fue cuando los tres corrieron hacia la luz y él no. El porque, ya no lo sabía. Pero había sido todo un malentendido claro.
«Ayame tenía miedo a la oscuridad y él lo sabe. Por eso corrimos. Fuimos en su ayuda. ¿No lo sabe? »
Cuando escuchó sus últimas palabras, lo tuvo claro.
« Sí que lo sabe. Claro que lo sabe. Solo lo esta usando de excusa. No sé lo que tiene en nuestra contra nuestra, pero es fuerte. Y va a usar cada motivo que le demos, por minúsculo que sea, para reafirmarse »
¿Por qué el odio de Jin era tan grande? Ya no hacia él. Odiaba a Ayame y a Riko también. Por alguna razón.
Dijese lo que dijese, haría palabras sordas. De eso estaba segura. No iba a funcionar. Por eso, no le paró ni hizo nada para que se detuviese.
Hasta que al menos, escuchó algo.
—No voy a tratar de convenceros de nada, yo soy el falso Jin. Dejadme en paz, por favor, solo dejadme en paz de una vez.
— ¿Eh? — Juro no comprendió. ¿Se había vuelto loco del todo ya? No. Había alguien en la puerta que acababa de abrir.
Corrió hacia ella, para toparse con quien imaginaba. Eran Ayame y Riko.
— ¡Ayame-san! ¡Riko-san! ¡Estais bien! — exclamó. Sin embargo, su alegría se fundió cuando vio a alguien más. Un tercer miembro. Era... —. ¿Q-Quién es ese? No puede ser...
Juro retrocedió, asustado. ¡Había otro Jin! ¡Otro más!
« ¿Un impostor? Pero entonces... ¿Qué me asegura que ellos sean los verdaderos también? ¡No puede ser! »
— ¿Hay dos Jin...? — murmuró, pegando la espalda contra la pared del pasillo. No se atrevía a acercarse a él. A ellos.
Ni si quiera le dejó contestar. Por supuesto que no le dejó contestar. Juro tenía argumentos, de hecho. Podía deducir que el momento en que Jin se había sentido abandonado fue cuando los tres corrieron hacia la luz y él no. El porque, ya no lo sabía. Pero había sido todo un malentendido claro.
«Ayame tenía miedo a la oscuridad y él lo sabe. Por eso corrimos. Fuimos en su ayuda. ¿No lo sabe? »
Cuando escuchó sus últimas palabras, lo tuvo claro.
« Sí que lo sabe. Claro que lo sabe. Solo lo esta usando de excusa. No sé lo que tiene en nuestra contra nuestra, pero es fuerte. Y va a usar cada motivo que le demos, por minúsculo que sea, para reafirmarse »
¿Por qué el odio de Jin era tan grande? Ya no hacia él. Odiaba a Ayame y a Riko también. Por alguna razón.
Dijese lo que dijese, haría palabras sordas. De eso estaba segura. No iba a funcionar. Por eso, no le paró ni hizo nada para que se detuviese.
Hasta que al menos, escuchó algo.
—No voy a tratar de convenceros de nada, yo soy el falso Jin. Dejadme en paz, por favor, solo dejadme en paz de una vez.
— ¿Eh? — Juro no comprendió. ¿Se había vuelto loco del todo ya? No. Había alguien en la puerta que acababa de abrir.
Corrió hacia ella, para toparse con quien imaginaba. Eran Ayame y Riko.
— ¡Ayame-san! ¡Riko-san! ¡Estais bien! — exclamó. Sin embargo, su alegría se fundió cuando vio a alguien más. Un tercer miembro. Era... —. ¿Q-Quién es ese? No puede ser...
Juro retrocedió, asustado. ¡Había otro Jin! ¡Otro más!
« ¿Un impostor? Pero entonces... ¿Qué me asegura que ellos sean los verdaderos también? ¡No puede ser! »
— ¿Hay dos Jin...? — murmuró, pegando la espalda contra la pared del pasillo. No se atrevía a acercarse a él. A ellos.
Hablo / Pienso
Avatar hecho por la increible Eri-sama.
...
Sellos implantados: Hermandad intrepida
- Juro y Datsue : Aliento nevado, 218. Poder:60