5/02/2018, 18:31
Ralexion se rió con la impunidad del opresor mientras los observaba correr. Al fin y al cabo no había sido para tanto, tan solo los había espantado, nadie había salido herido, y probablemente esos filósofos ya detestaban de por sí a los ninja sin necesidad de la demostración de poder del moreno. Igualmente empeoraría la opinión de los estudiantes, sin lugar a dudas, ¿pero qué importaba?
«¡Un trabajo bien hecho!», se congratuló el muchacho en su fuero interno. Grande fue su alegría al comprobar que los eruditos no habían dispuesto de tiempo suficiente como para mancillar ese último santuario, lo que quería decir que la misión había sido cumplida, ya podían retornar a la aldea y adquirir su merecida paga.
—Volvamos a casa, Ritsuko. No te separes —le informó a su compañera, visiblemente de mejor humor que el previamente exhibido—. Quizás vuelvan, pero ya no será asunto nuestro. Si esos vándalos retornan y los monjes se ven obligados a contratarnos de nuevo, más dinero para ti y para mí.
Así de pragmático era el muchacho, a pesar de su bondad natural. Ralexion no había tardado en darse de bruces con la realidad capitalista del mundo cuando se vio obligado a formar parte de Kusagakure, y si era en tal de asegurar los cuidados que su hermana necesitaba, estaba dispuesto a hacer cualquier cosa.
«¡Un trabajo bien hecho!», se congratuló el muchacho en su fuero interno. Grande fue su alegría al comprobar que los eruditos no habían dispuesto de tiempo suficiente como para mancillar ese último santuario, lo que quería decir que la misión había sido cumplida, ya podían retornar a la aldea y adquirir su merecida paga.
—Volvamos a casa, Ritsuko. No te separes —le informó a su compañera, visiblemente de mejor humor que el previamente exhibido—. Quizás vuelvan, pero ya no será asunto nuestro. Si esos vándalos retornan y los monjes se ven obligados a contratarnos de nuevo, más dinero para ti y para mí.
Así de pragmático era el muchacho, a pesar de su bondad natural. Ralexion no había tardado en darse de bruces con la realidad capitalista del mundo cuando se vio obligado a formar parte de Kusagakure, y si era en tal de asegurar los cuidados que su hermana necesitaba, estaba dispuesto a hacer cualquier cosa.