5/02/2018, 21:57
— Eri, Eri, Eri, Eri, Eri. ¿Has visto eso? ¡Una persona azul! ¿Lo has visto? Estaba ahí delante como si tal cosa. Eri, ¿lo has visto?
—Sí, ha sido... Extraño —musitó la kunoichi —. Puede que esté relacionado con el robo, pero no podemos sacar conjeturas nada más llegar, lo primero es hablar con Tono-san.
Y tras aquella pequeña conversación de un par de oraciones intercambiadas como buenamente habían podido entre toda la marabunta de gente, volvieron a sumirse en sus pensamientos mientras seguían subiendo hasta el famoso museo de Taikarune.
— ¿Queda mucho? Ya estuviste aquí con Juro, ¿no? Así que sabrás cuanto queda, ¿queda mucho?
—Queda un rato, y con toda esta gente... No será tan fácil llegar, Nabi, ¿está Stuffy bien?
Y sin parar de caminar, poniendo un pie delante para ser adelantado por el otro y así sucesivamente, lograron llegar hasta aquel gran edificio que se alzaba en lo alto de Taikarune. Media hora les había costado cuando seguramente y sin nadie a los alrededores les hubiera cundido mucho más. La kunoichi del grupo paró un momento para recobrar el aliento y sentir sus piernas.
—Nabi, mira, está cerrado... —dijo lo obvio la pelirroja —. Creo que tendremos que hablar con los guardias, identificarnos y enseñar el pergamino, espero que con eso baste para que nos dejen entrar...
Tomó el pergamino que llevaba guardado en su portaobjetos y asintió a la nada, preparándose mentalmente para lo que estaba por hacer. Luego se dirigió a uno de los guardias y esperó a que el hombre con quien estaban hablando terminase para no faltarles el respeto, luego procedería a identificarse como bien le había dicho a Nabi que haría por ellos.
—Sí, ha sido... Extraño —musitó la kunoichi —. Puede que esté relacionado con el robo, pero no podemos sacar conjeturas nada más llegar, lo primero es hablar con Tono-san.
Y tras aquella pequeña conversación de un par de oraciones intercambiadas como buenamente habían podido entre toda la marabunta de gente, volvieron a sumirse en sus pensamientos mientras seguían subiendo hasta el famoso museo de Taikarune.
— ¿Queda mucho? Ya estuviste aquí con Juro, ¿no? Así que sabrás cuanto queda, ¿queda mucho?
—Queda un rato, y con toda esta gente... No será tan fácil llegar, Nabi, ¿está Stuffy bien?
Y sin parar de caminar, poniendo un pie delante para ser adelantado por el otro y así sucesivamente, lograron llegar hasta aquel gran edificio que se alzaba en lo alto de Taikarune. Media hora les había costado cuando seguramente y sin nadie a los alrededores les hubiera cundido mucho más. La kunoichi del grupo paró un momento para recobrar el aliento y sentir sus piernas.
—Nabi, mira, está cerrado... —dijo lo obvio la pelirroja —. Creo que tendremos que hablar con los guardias, identificarnos y enseñar el pergamino, espero que con eso baste para que nos dejen entrar...
Tomó el pergamino que llevaba guardado en su portaobjetos y asintió a la nada, preparándose mentalmente para lo que estaba por hacer. Luego se dirigió a uno de los guardias y esperó a que el hombre con quien estaban hablando terminase para no faltarles el respeto, luego procedería a identificarse como bien le había dicho a Nabi que haría por ellos.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)