13/02/2018, 17:56
Kaido vio la duda en torno a sus ojos. Vio como cambiaba el peso del cuerpo de una pierna a otra. Vio su conflicto interno, sus dudas claramente reflejadas en su rostro. El joven de la cicatriz se acababa de dar cuenta que se había metido con el tipo equivocado. No obstante, y ahora que había captado la atención de todos, amedrentarse no era una opción. No para alguien como él.
—Te he preguntado si le has chupado la polla a Kano, azulado. —Uno de los chicos no pudo evitar una carcajada, y varias risillas se unieron a él. Kila, en cambio, se mantenía en silencio y con el ceño fruncido—. Porque no veo otra explicación para tanto halago con la mierda de copa que preparaste —a medida que hablaba, se iban envalentonando más y más. Apretó los puños—. ¡Si estaba todo amañado al menos ahorradnos el paripé!
—Te he preguntado si le has chupado la polla a Kano, azulado. —Uno de los chicos no pudo evitar una carcajada, y varias risillas se unieron a él. Kila, en cambio, se mantenía en silencio y con el ceño fruncido—. Porque no veo otra explicación para tanto halago con la mierda de copa que preparaste —a medida que hablaba, se iban envalentonando más y más. Apretó los puños—. ¡Si estaba todo amañado al menos ahorradnos el paripé!