17/04/2018, 23:35
"¿Pero qué se cree esta perra? Evitándome cómo si yo fuera no sé que cosa. Seguro se las lleva de digna cómo para osar acercarse a mí la muy chula." Maldijo dentro de sí, observando de reojo a la rubia por cada movimiento que hacía. Incluso, mientras la muchacha y el jounin platicaban, la mirada afilada del Senju no se apartó de Reika, ignorando completamente lo que estos hablaban. No fue sino hasta que el tendero les llevó su orden a la mesa que el tuerto fijó su atención en otra cosa. "Ya puedo comer en paz." Aunque nuevamente el Uchiha parecía querer esforzarse para que ambos genin se vieran forzados a entablar conversación. "Ay, este nene." Rodó el ojo.
—Mucho menos ajetreado que ustedes en Uzushio seguramente, con todo lo que ha ocurrido en su aldea~. canturreó observando al pelinegro para luego desviar de nuevo su vista al plato.
El platillo no parecía nada del otro mundo, pero al probarlo estaba bastante bueno, mucho mejor que lo que preparaba su hermana. "Mmmh, la hubiera pedido sin sal mejor." Fue ese pensamiento el que le hizo voltear a ver al tendero, justo a tiempo para percatarse de las nuevas visitas en el local, las cuales por simple apariencia no lucían muy amigables que se diga. "Yayuuui, eso si que es una mujer con carne." Sin embargo, pese a que no le gustaba juzgar por apariencia -descartandoa las rubias- al ver que el encargado pasó de estar alegre a incómodo empezaron a pasar muchas ideas por su cabeza.
"A ver. A a este maje lo están extorsionando, o bien no hay ninguna ilegalidad de por medio, o quizás juzgo de más y las muchachas vienen por algo justo y él es el malo del cuento. Cómo sea, tengo el pretexto adecuado para averiguarlo." No se lo pensó dos veces y se levantó de la mesa, para luego meterse las manos a los bolsillos y caminar hasta la barra, intentando escuchar algo de lo que estaban platicando antes de llegar con el trío.
—Disculpen que les interrumpa. Señor Yemi, ¿tiene bebidas? Necesito algo para pasarme la comida— ordenó cómo si nada, esperando la reacción de las féminas.
—Mucho menos ajetreado que ustedes en Uzushio seguramente, con todo lo que ha ocurrido en su aldea~. canturreó observando al pelinegro para luego desviar de nuevo su vista al plato.
El platillo no parecía nada del otro mundo, pero al probarlo estaba bastante bueno, mucho mejor que lo que preparaba su hermana. "Mmmh, la hubiera pedido sin sal mejor." Fue ese pensamiento el que le hizo voltear a ver al tendero, justo a tiempo para percatarse de las nuevas visitas en el local, las cuales por simple apariencia no lucían muy amigables que se diga. "Yayuuui, eso si que es una mujer con carne." Sin embargo, pese a que no le gustaba juzgar por apariencia -descartandoa las rubias- al ver que el encargado pasó de estar alegre a incómodo empezaron a pasar muchas ideas por su cabeza.
"A ver. A a este maje lo están extorsionando, o bien no hay ninguna ilegalidad de por medio, o quizás juzgo de más y las muchachas vienen por algo justo y él es el malo del cuento. Cómo sea, tengo el pretexto adecuado para averiguarlo." No se lo pensó dos veces y se levantó de la mesa, para luego meterse las manos a los bolsillos y caminar hasta la barra, intentando escuchar algo de lo que estaban platicando antes de llegar con el trío.
—Disculpen que les interrumpa. Señor Yemi, ¿tiene bebidas? Necesito algo para pasarme la comida— ordenó cómo si nada, esperando la reacción de las féminas.