5/05/2018, 23:37
Con la advertencia de que la bibliotecaria se acercaba, Kagetsuna actuó lo más rápido posible, acomodó mi cuerpo lo mejor posible en el espaldar de la silla, mi cuello no lograba sostener mi cabeza sin que esta se ladease para cualquier lado e incluso el libro que estaba en mis manos tampoco quería colaborar con el plan del tuerto; ante la inminente aproximación de aquella mujer, no le tocó más que recurrir a algún otro plan, dejando a mi, Keisuke, con los brazos sobre la mesa y la cabeza hacia adelante.
El sonido de los tacones se hizo cada vez más fuerte hasta que el pelimorado supo que se encontraba a unos cuantos centímetros, fue ahí en cuanto él entro en acción, interceptándola. —Escuché una conmoción hace poco y vine a verificar sí todo estaba en orden.— Anunció
Sí Kagetsuna desviaba levemente su mirada hacia donde mi cuerpo se encontraba, vería como éste comenzaba a moverse lentamente hacia un lado, pronto se estamparía contra el suelo, afortunadamente había alfombra en esa sección, pero... ¿sería suficiente para amortiguar mi cuerpo sin causar tanto revuelo?
—Dígame usted, ¿está todo en orden? ¿Escuchó quién estaba gritando?— Exigió amenazante mientras se disponía a seguir avanzando.
El sonido de los tacones se hizo cada vez más fuerte hasta que el pelimorado supo que se encontraba a unos cuantos centímetros, fue ahí en cuanto él entro en acción, interceptándola. —Escuché una conmoción hace poco y vine a verificar sí todo estaba en orden.— Anunció
Sí Kagetsuna desviaba levemente su mirada hacia donde mi cuerpo se encontraba, vería como éste comenzaba a moverse lentamente hacia un lado, pronto se estamparía contra el suelo, afortunadamente había alfombra en esa sección, pero... ¿sería suficiente para amortiguar mi cuerpo sin causar tanto revuelo?
—Dígame usted, ¿está todo en orden? ¿Escuchó quién estaba gritando?— Exigió amenazante mientras se disponía a seguir avanzando.