9/05/2018, 18:22
Tal y como se esperaba, su llegada con la última pieza que les faltaba para salir de allí fue muy bien recibida por parte de Ayame pero Jin... Jin era un caso a parte, según él todos estaban en su contra, no confiaba en nadie y al parecer prefería morir allí antes dar su brazo a torcer.
—¿De verdad pensáis que voy a creer una sola de vuestras palabras? Sobr etodo, la palabra de tu único testigo Juro, la palabra de Riko no vale una mierda. Hay dos formas de usar las piezas, una, nos saca de la casa y nos deja expuestos a los “Cazadores”, la otra, rompe la maldición y se los lleva consigo. Conozco ambas formas de usar las piezas, me lo contó la casa antes de que juro intentara asesinarme. Pero no obtendréis mi ayuda. No hasta que encontremos a Jin. No creo ni una sola de las palabras de Juro. No voy a cree NUNCA ni una sola de las palabras de Riko. Ayame no tiene la culpa, y de verdad que lo siento por ella ¿Pero vosotros? No merecéis ni que os dirija la palabra. No voy a jugármela a dejar aquí a mi padre, encerrado, solo por confiar en vosotros dos una segunda vez. No pienso cooperar hasta que no vea con mis propios ojos que Jin no es Jin.
Mientras Jin soltaba aquel relato sin sentido en el que nada más que pensaba en sí mismo y en lo mucho que le dolía que el resto hubiera intentado salir de allí, la casa comenzó a temblar, cada vez más fuerte, y sus vidas comenzaban a peligrar seriamente únicamente porque un integrante del grupo no quería cooperar.
— Mira macho, estoy harto de tus paranoias, llevamos aquí un tiempo y no has hecho más que poner problemas, te estamos diciendo la verdad, la persona que es IDÉNTICA a ti, lo cual ya hace difícil que sea tu padre, ¡NI SI QUIERA ES UNA PERSONA! Es un ente de la casa. — Suspiró, tratando de calmarse. — Cuanto más tiempo pasamos aquí más probable es que acabemos muriendo todos, así que, si haces el favor, ayúdanos a salir y, después, si quieres, te vuelves a meter hasta que encuentres al fantasma para que él mismo te diga que no es tu padre, ¿te parece? — Dijo acercándose cada vez más a Jin.
Riko había perdido los nervios, no sabía qué hacer ya para que el amenio cooperase un poco con el resto, si no les ayudaba ya, que era cuando le necesitaban, le daría una paliza y usaría su cuerpo para mover la pieza sin dudarlo ni un segundo.
—¿De verdad pensáis que voy a creer una sola de vuestras palabras? Sobr etodo, la palabra de tu único testigo Juro, la palabra de Riko no vale una mierda. Hay dos formas de usar las piezas, una, nos saca de la casa y nos deja expuestos a los “Cazadores”, la otra, rompe la maldición y se los lleva consigo. Conozco ambas formas de usar las piezas, me lo contó la casa antes de que juro intentara asesinarme. Pero no obtendréis mi ayuda. No hasta que encontremos a Jin. No creo ni una sola de las palabras de Juro. No voy a cree NUNCA ni una sola de las palabras de Riko. Ayame no tiene la culpa, y de verdad que lo siento por ella ¿Pero vosotros? No merecéis ni que os dirija la palabra. No voy a jugármela a dejar aquí a mi padre, encerrado, solo por confiar en vosotros dos una segunda vez. No pienso cooperar hasta que no vea con mis propios ojos que Jin no es Jin.
Mientras Jin soltaba aquel relato sin sentido en el que nada más que pensaba en sí mismo y en lo mucho que le dolía que el resto hubiera intentado salir de allí, la casa comenzó a temblar, cada vez más fuerte, y sus vidas comenzaban a peligrar seriamente únicamente porque un integrante del grupo no quería cooperar.
— Mira macho, estoy harto de tus paranoias, llevamos aquí un tiempo y no has hecho más que poner problemas, te estamos diciendo la verdad, la persona que es IDÉNTICA a ti, lo cual ya hace difícil que sea tu padre, ¡NI SI QUIERA ES UNA PERSONA! Es un ente de la casa. — Suspiró, tratando de calmarse. — Cuanto más tiempo pasamos aquí más probable es que acabemos muriendo todos, así que, si haces el favor, ayúdanos a salir y, después, si quieres, te vuelves a meter hasta que encuentres al fantasma para que él mismo te diga que no es tu padre, ¿te parece? — Dijo acercándose cada vez más a Jin.
Riko había perdido los nervios, no sabía qué hacer ya para que el amenio cooperase un poco con el resto, si no les ayudaba ya, que era cuando le necesitaban, le daría una paliza y usaría su cuerpo para mover la pieza sin dudarlo ni un segundo.
![[Imagen: tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif]](https://78.media.tumblr.com/ef716a7a224d02d15153150120153d79/tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif)
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