6/08/2018, 22:25
Ya le habían dicho que sí, era muy tarde para arrepentirse; ahora no estaba sola en aquello. Reika parecía una "buena persona", y como kunoichi que era la pelivioleta contaba con que supiera defenderse en caso de que fuera necesario, pero a pesar de que no tenía ningún motivo fehaciente que la condujera a pensar así, un mal presentimiento se formó en su mente y le hizo un nudo en la garganta.
—Pues... ¡espero que tengamos una buena aventura! O algo así... —afirmó en un doloroso intento fallido de ser positiva.
Acto seguido la rubia alzó la mirada hasta el techo de la bodega, lo que confundió a Karma.
—¿Ocurre algo, Reika-san? —preguntó con inocencia.
Pero antes de que se le pudiera responder, una potente ola sacudió el navío hacia la izquierda. La médica gimió de sorpresa y su cuerpo se desplazó de improvisto, lo que la llevó a golpearse con toda la cara contra la viga sobre la que se estaba apoyando. Se quejó un par de veces, acariciándose el rostro.
Parecía que la mar se estaba poniendo un poco brava.
—Pues... ¡espero que tengamos una buena aventura! O algo así... —afirmó en un doloroso intento fallido de ser positiva.
Acto seguido la rubia alzó la mirada hasta el techo de la bodega, lo que confundió a Karma.
—¿Ocurre algo, Reika-san? —preguntó con inocencia.
Pero antes de que se le pudiera responder, una potente ola sacudió el navío hacia la izquierda. La médica gimió de sorpresa y su cuerpo se desplazó de improvisto, lo que la llevó a golpearse con toda la cara contra la viga sobre la que se estaba apoyando. Se quejó un par de veces, acariciándose el rostro.
Parecía que la mar se estaba poniendo un poco brava.