2/09/2018, 02:00
—¿El qué? —escuchar esa respuesta por parte de Keisuke consiguió irritar aún más al peliverde, quien decidió al menos dejarle acabar de hablar—, he tenido la oportunidad de escuchar malos comentarios de tu gente, y bueno a la final van a terminar siendo verdad. No me juzgues mal, yo no estoy en contra de ustedes, simplemente te lo estoy diciendo porque es de mal gusto que hablen mal de los demás, y más sí generalizan, ¿no crees?
Dicho esto, Keisuke caminó hacia la cava y le lanzó una lata al peliverde, tomando otra para sí mismo.
—¿Eh?
Daigo miró aquella lata durante un par de segundos. Probablemente era la primera vez que tenía una entre sus manos, pero aún así sabía lo que era. Era... ¿alcohol?
Daigo decidió quedarse con la lata, por educación, pero no se la bebería.
—No lo tomes contra mi —dijo Keisuke mientras Daigo caminaba un par de pasos para sentarse donde las olas apenas puedan tocar sus pies—, Más bien deberías pensar en ello... ¿Por qué solo hay un representante de Kusagakure?
El peliverde dejó escapar un cansado suspiro antes de responder.
—No lo sé, Keisuke-san... —dijo—, y tampoco sé donde habrás escuchado esos estúpidos rumores, pero te agradecería que no lo vayas diciendo tan a la ligera.
Se tomó una pequeña pausa para enfriarse un poco mientras se inclinaba hacia atrás, apoyándose sobre sus manos. Ya no estaba enfadado, solo necesitaba calmarse para volver a la normalidad.
—Aún así... —agitó la cabeza varias veces, como si intentara que las dudas símplemente salieran disparadas de su cabeza para no volver—, olvídalo, no debería de estar pensando en esta clase de tonterías. Tengo que continuar con mi entrenamiento.
Dicho esto, Keisuke caminó hacia la cava y le lanzó una lata al peliverde, tomando otra para sí mismo.
—¿Eh?
Daigo miró aquella lata durante un par de segundos. Probablemente era la primera vez que tenía una entre sus manos, pero aún así sabía lo que era. Era... ¿alcohol?
Daigo decidió quedarse con la lata, por educación, pero no se la bebería.
—No lo tomes contra mi —dijo Keisuke mientras Daigo caminaba un par de pasos para sentarse donde las olas apenas puedan tocar sus pies—, Más bien deberías pensar en ello... ¿Por qué solo hay un representante de Kusagakure?
El peliverde dejó escapar un cansado suspiro antes de responder.
—No lo sé, Keisuke-san... —dijo—, y tampoco sé donde habrás escuchado esos estúpidos rumores, pero te agradecería que no lo vayas diciendo tan a la ligera.
Se tomó una pequeña pausa para enfriarse un poco mientras se inclinaba hacia atrás, apoyándose sobre sus manos. Ya no estaba enfadado, solo necesitaba calmarse para volver a la normalidad.
—Aún así... —agitó la cabeza varias veces, como si intentara que las dudas símplemente salieran disparadas de su cabeza para no volver—, olvídalo, no debería de estar pensando en esta clase de tonterías. Tengo que continuar con mi entrenamiento.
¡Muchas gracias a Nao por el sensual avatar y a Ranko por la pedazo de firma!
Team pescado.