14/09/2018, 10:58
Escuchó atentamente a Riko, sin cortarle ni hacer ningún aspaviento o movimiento que pudiese serle incómodo. Asentía para que supiera que estaba escuchándole mientras pensaba, curiosa, cómo era la vida en aquella aldea. «Con que... Vivían en una aldea un poco pobre donde ellos tenían que cultivar lo que necesitaban para vivir, es bastante duro, pero a la vez bastante bueno, así él aprendió, aunque es algo tímido...»
—¿Cómo se llamaba? —preguntó, refiriéndose al lugar de donde venía—. Seguro que era muy diferente a Uzushiogakure, imagino que echarás un poco de menos aquello, el hogar... —murmuró, aunque sin perder su pequeña sonrisa—. No te preocupes, yo te ayudaré aquí.
Se levantó de la silla y señaló la puerta.
—Vamos a ver de lo que eres capaz.
Y esperó a que se pusiese a su lado para salir de aquella habitación.
—¿Cómo se llamaba? —preguntó, refiriéndose al lugar de donde venía—. Seguro que era muy diferente a Uzushiogakure, imagino que echarás un poco de menos aquello, el hogar... —murmuró, aunque sin perder su pequeña sonrisa—. No te preocupes, yo te ayudaré aquí.
Se levantó de la silla y señaló la puerta.
—Vamos a ver de lo que eres capaz.
Y esperó a que se pusiese a su lado para salir de aquella habitación.