13/10/2018, 20:09
Le escuchó hablar y supuso la negativa al asunto, pero por otra parte se alegró de que el chico de Ame estuviera dispuesto a acompañarlo, al menos sería más entretenido y no lo haría solo, al parecer, ahora el objetivo había cambiado, más que un entrenamiento, sería una búsqueda de agua -Bueno ¿qué más remedio no amigo? Le soltó el genin un poco alegre, en realidad, la falta de agua le parecía un problema, pero a la vez le sonó divertido explorar un poco más el lugar. Así que a continuación se desperezó con lo brazos hacia arriba intentando hacer crujir los huesos de su espalda, se paró y limpio su pantalón por si el viento había levantado polvo. Giró hacia Roga, pero no lo observo a los ojos, observaba hacia arriba, como con los ojos perdidos en su mente mientras revisaba de nuevo sus ropajes con una mano, mordiéndose la lengua como si estuviera concentrado buscando algo.
-Aquí está. Festejó, mientras intentaba extender un papel un poco amarillento, quizá por los años de vida que tenía el mismo, desde dentro de sus ropajes. –Este es el mapa que me trajo hasta aquí, así que le tengo un poco de confianza.Subió su mano hasta su cara y acariciaba su pera mientras que pensativo contemplaba aquel pergamino. El mapa casi eran garabatos, sus líneas estaban muy gastadas por el paso del tiempo, y sería ilegible para alguien que en sus ojos llevara un poco de miopía, pero no era el problema de Geki, él no recordaba por cuál lado había llegado a la estructura, era mucho más fácil ubicarse a la salida de Kusagakure que aquí, en donde jamás había estado, además, la charla con el otro chico le había hecho perder la orientación.
*mmm...Bueno creo que vine desde allá, así que, entendiendo este mapa, tendríamos que ir para el otro lado, pero es que no hay una referencia muy marcada aquí...* retumbaron las palabras en sus adentros.
Geki giró la cabeza hacia el bosque –Bueno, estoy cien por ciento seguro de que es por allá, según lo que dice aquí. Señaló el shinobi, apuntando con su dedo a una dirección donde los arboles se iban poniendo cada vez más y más frondosos. Giraba y re giraba el mapa buscándole algo de sentido o tratando de re afirmar su decisión, pero no le encontraba ninguno.
–Bueno no se diga más, que este cuerpo tiene sed. Finalizó guardando de nuevo el mapa en el mismo lugar de donde lo había sacado. El muchacho se apoyó en las maderas y dió un salto para bajar de la estructura. Empezó a caminar dirigiéndose al anterior lugar señalado, con las manos en su cabeza. -Vamos, vamos, que al final claramente tú tienes más energías que yo. le dijo en forma chistosa, sin girarse a su compañero mientras seguía su camino a lo verde y lo dejaba atrás.
-Aquí está. Festejó, mientras intentaba extender un papel un poco amarillento, quizá por los años de vida que tenía el mismo, desde dentro de sus ropajes. –Este es el mapa que me trajo hasta aquí, así que le tengo un poco de confianza.Subió su mano hasta su cara y acariciaba su pera mientras que pensativo contemplaba aquel pergamino. El mapa casi eran garabatos, sus líneas estaban muy gastadas por el paso del tiempo, y sería ilegible para alguien que en sus ojos llevara un poco de miopía, pero no era el problema de Geki, él no recordaba por cuál lado había llegado a la estructura, era mucho más fácil ubicarse a la salida de Kusagakure que aquí, en donde jamás había estado, además, la charla con el otro chico le había hecho perder la orientación.
*mmm...Bueno creo que vine desde allá, así que, entendiendo este mapa, tendríamos que ir para el otro lado, pero es que no hay una referencia muy marcada aquí...* retumbaron las palabras en sus adentros.
Geki giró la cabeza hacia el bosque –Bueno, estoy cien por ciento seguro de que es por allá, según lo que dice aquí. Señaló el shinobi, apuntando con su dedo a una dirección donde los arboles se iban poniendo cada vez más y más frondosos. Giraba y re giraba el mapa buscándole algo de sentido o tratando de re afirmar su decisión, pero no le encontraba ninguno.
–Bueno no se diga más, que este cuerpo tiene sed. Finalizó guardando de nuevo el mapa en el mismo lugar de donde lo había sacado. El muchacho se apoyó en las maderas y dió un salto para bajar de la estructura. Empezó a caminar dirigiéndose al anterior lugar señalado, con las manos en su cabeza. -Vamos, vamos, que al final claramente tú tienes más energías que yo. le dijo en forma chistosa, sin girarse a su compañero mientras seguía su camino a lo verde y lo dejaba atrás.