25/10/2018, 21:09
Se tomaba su tiempo porque sinceramente no le interesaba, como ya había explicado, ayudar a una niña que probablemente estuviese siendo regañada por su familia. Al parecer el ninja extranjero no tenía mucha paciencia. Vamos, ella tenía que prepararse por si en el más remoto de los casos había algún peligro por allá. -Calma. ~ No hay prisa. - Ni que se la fuera a comer algún animal salvaje. Si estaba llorando era porque aún estaba viva o sentía dolor, lo que significaba que todo estaba bien. Era una lógica algo retorcida, pero para ser sinceros, Akasha todavía estaba molesta porque la maldita escuincle interrumpió su baño.
-Oye ¿exactamente como planeas seguirme el ritmo? - La pelinegra dejó salir una leve risilla y tocó con el dedo índice la nariz de su compañero. -Hehehe. ♥ Que inocente. ~ - No le respondió. Simplemente tomó sus pertenencias y las puso sobre su espalda para dirigirse hacia el lago. Esperó que él se adelantara un poco y empezó a caminar sobre el agua hasta detenerse a su lado.
-¿Quieres unas carreritas? - Mencionó con picardía. -El último que llegue a la isla le debe una cena, masajes, y un oral al otro. Espero que no tengas novia. ~ A la cuenta de tres... - Espera, la cena... Pero lo otro... ¿Estaba hablando en serio o qué fue eso? -¡Tres! - La muy tramposa salió corriendo por el agua mientras reía para sí misma por el camino. De por si queria... ¡Tenía que ganar! Necesitaba la cena. No quería seguir gastando dinero.
-Oye ¿exactamente como planeas seguirme el ritmo? - La pelinegra dejó salir una leve risilla y tocó con el dedo índice la nariz de su compañero. -Hehehe. ♥ Que inocente. ~ - No le respondió. Simplemente tomó sus pertenencias y las puso sobre su espalda para dirigirse hacia el lago. Esperó que él se adelantara un poco y empezó a caminar sobre el agua hasta detenerse a su lado.
-¿Quieres unas carreritas? - Mencionó con picardía. -El último que llegue a la isla le debe una cena, masajes, y un oral al otro. Espero que no tengas novia. ~ A la cuenta de tres... - Espera, la cena... Pero lo otro... ¿Estaba hablando en serio o qué fue eso? -¡Tres! - La muy tramposa salió corriendo por el agua mientras reía para sí misma por el camino. De por si queria... ¡Tenía que ganar! Necesitaba la cena. No quería seguir gastando dinero.