Aspa y hueso

Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.

Aspa y hueso

Uchiha Datsue Sin conexión

Uzukage

Nivel: 40
Exp: 446 puntos
Dinero: 3805 ryōs

· Fue 70

· Pod 100

· Res 40

· Int 80

· Agu 70

· Car 110

· Agi 70

· Vol 80

· Des 80

· Per 70

#19

26/10/2018, 02:40

—Eres un sádico, ¿lo sabías?

—Eso es que no has conocido a Sakamoto Katsumi. Ni quieres conocerla, créeme. —No solo era sádica, sino una jodida caníbal. El Uchiha recordaba muy bien el día en que lo había descubierto, para su desgracia.

Pero había logrado su objetivo de motivar a Riko, que era lo que buscaba. Observó —no sin aprensión, por mucho que ya se lo hubiese visto hacer una vez— como se quitó un hueso del brazo para improvisarse una espada. El Uchiha, a su vez, le replicó desenvainando el ninjatō que portaba a la espalda.

Lo que sucedió a continuación fue un intercambio brutal de golpes, en el que se oía el acero entrechocando contra el hueso, sus respiraciones agitadas y sus rápidos pasos sobre el suelo. Estocada, estocada, estocada. Riko era tan rápido que su brazo se distorsionaba, creando réplicas de apuñalamientos. Datsue las esquivaba todas, interponiendo su espada contra el hueso y evadiendo la otra estocada echándose a un lado, con una suerte de gracia felina. Pam, pam, pam. A un milímetro del error. A una milésima de segundo de que Riko alcanzase la diana.

Y entonces contraatacó. Hizo uso del Ninpō: Bunkai y con un rápido movimiento de muñeca trató de desarmar a Riko, encadenando el ardid con un rápido tajo de izquierda a derecha sobre su pecho, tan medido y calculado que solo le haría un corte superficial.