30/10/2018, 06:54
Bueno, al menos el tipo no era idiota y se dejaría tratar las heridas. En el mundo habían personas que no querían visitar un doctor y eso era tan desesperante. Por lo menos éste muchacho si tenía algo de sentido común... Esperaba. Así que tomó asiento y Akasha comenzó a buscar entre las pertenencias de su mochila. "No se si es cansino llevar esta mochila a todas partes, o si él tiene suerte de que la traiga." - Pensaba mientras sacaba una botella de agua y la toalla con la que se había secado antes. Utilizaría la botella de agua para lo obvio, y con la toalla ayudaría a limpiar y secar la herida. La parte más humeda para la limpieza, y la más seca para lo demás.
Sinceramente no sabía si seguir en la isla o no. No estaba de misión, la mocosa no era de su incumbencia, y casi pierde la vida por estar metiéndose donde no debía. Pero a la misma vez, Akasha tenía sentimientos encontrados con ese lugar: No quería que la mocosa muriera -pero ojala y la salvara otro-, y podía utilizar la situación de "desventaja" para aprender algo para futuras misiones. Es decir, podía verle el lado positivo a ese lugar y su mala situación, pues en el futuro podría estar en peores condiciones, ¿verdd? Basta de quejarse. Podía sacarle lo positivo a esa mala experiencia. Además de que había aprendido algo nuevo sobre un ninja en específico, y no precisamente leyendo libros. sino estando ella presente. No es tan malo después de todo.
-Digamos que curarme y ayudarme con los bichos cuenta como el masaje, puedo invitarte a comer luego si me sigues ayudando... - ¡Waaahhh! ¡Comida! ¿¡Dijo comida, verdad!? Los ojos de la pelinegra brillaron de la emoción y una sonrisa se dibujó en su rostro. ¡La iban a invitar a comer! ♥ -Pero me seguirás debiendo una cosa. - Y ahí fue cuando Ao sentiría un dolor algo molesto en su espalda, y es que la pelinegra, para vengarse, le había hundido los dedos en el area de la herida, sin dejar su sonrisa de lado. -¿Seguro que te debo algo? ~ - Le preguntó en tono juguetón.
Tomó la parte inferior del lujoso kimono y... Suspiró. -No se porque voy tan lejos como para hacer esto, pero... - Pasó sus brazos alrededor del cuerpo ajeno para vendarlo con el pedazo de tela y hacer un nudo. -Mas te vale que lo cuides. - Mencionó refiriéndose al pedazo de tela. -...era de mis favoritos... - Susurró.
Sinceramente no sabía si seguir en la isla o no. No estaba de misión, la mocosa no era de su incumbencia, y casi pierde la vida por estar metiéndose donde no debía. Pero a la misma vez, Akasha tenía sentimientos encontrados con ese lugar: No quería que la mocosa muriera -pero ojala y la salvara otro-, y podía utilizar la situación de "desventaja" para aprender algo para futuras misiones. Es decir, podía verle el lado positivo a ese lugar y su mala situación, pues en el futuro podría estar en peores condiciones, ¿verdd? Basta de quejarse. Podía sacarle lo positivo a esa mala experiencia. Además de que había aprendido algo nuevo sobre un ninja en específico, y no precisamente leyendo libros. sino estando ella presente. No es tan malo después de todo.
-Digamos que curarme y ayudarme con los bichos cuenta como el masaje, puedo invitarte a comer luego si me sigues ayudando... - ¡Waaahhh! ¡Comida! ¿¡Dijo comida, verdad!? Los ojos de la pelinegra brillaron de la emoción y una sonrisa se dibujó en su rostro. ¡La iban a invitar a comer! ♥ -Pero me seguirás debiendo una cosa. - Y ahí fue cuando Ao sentiría un dolor algo molesto en su espalda, y es que la pelinegra, para vengarse, le había hundido los dedos en el area de la herida, sin dejar su sonrisa de lado. -¿Seguro que te debo algo? ~ - Le preguntó en tono juguetón.
Tomó la parte inferior del lujoso kimono y... Suspiró. -No se porque voy tan lejos como para hacer esto, pero... - Pasó sus brazos alrededor del cuerpo ajeno para vendarlo con el pedazo de tela y hacer un nudo. -Mas te vale que lo cuides. - Mencionó refiriéndose al pedazo de tela. -...era de mis favoritos... - Susurró.