15/11/2018, 01:24
— Bueno, aprovechando que estamos en Yachi, me daré una vuelta mientras tu hablas con tus amigos, si es que los encuentras... ¡Nos veremos en un rato!
«¿Otra vez?»
Me encogí de hombros.
— Está bien — dije llevándome las manos a los bolsillos — Kumopansa, ve con ella, yo ya no me fio de nada, yo cuidaré de mi mismo
— ¡¿Qué?! ¿Estás seguro?
— Que si, tranquilízate. Y de paso evitaremos que esa loca vuelva a patearte como si fueras una maldita pelota
— Ah, si, es cierto. Qué mujer..
Y así fue. Mamá y Kumopansa partieron y yo visualicé un pequeño puestecito ambulante en el que vendían zumo de calabaza. Una de las múltiples variantes de producto de las calabazas que allí se fabricaban. Por lo que me compré uno. Al parecer era bastante refrescante, no calmaba la sed como el agua, pero era tan refrescante como una naranjada o una limonada, justo lo que necesitaba en aquellos momentos después de todo lo de Kabotaro.
Caminé un poco y me recosté en un poste de hierro, colocando mi espalda y la suela de mi sandalia sobre su superficie, dejando la mirada perdida en el horizonte y dando algún que otro sorbo a cada rato. a lo lejos llegaban Daruu y Ayame, todavía disfrazados, pero yo estaba tan ensimismado en el horizonte y en el campo de cultivo de calabazas que tenía al frente, al otro lado de la calle que ni siquiera me percaté.
«¿Otra vez?»
Me encogí de hombros.
— Está bien — dije llevándome las manos a los bolsillos — Kumopansa, ve con ella, yo ya no me fio de nada, yo cuidaré de mi mismo
— ¡¿Qué?! ¿Estás seguro?
— Que si, tranquilízate. Y de paso evitaremos que esa loca vuelva a patearte como si fueras una maldita pelota
— Ah, si, es cierto. Qué mujer..
Y así fue. Mamá y Kumopansa partieron y yo visualicé un pequeño puestecito ambulante en el que vendían zumo de calabaza. Una de las múltiples variantes de producto de las calabazas que allí se fabricaban. Por lo que me compré uno. Al parecer era bastante refrescante, no calmaba la sed como el agua, pero era tan refrescante como una naranjada o una limonada, justo lo que necesitaba en aquellos momentos después de todo lo de Kabotaro.
Caminé un poco y me recosté en un poste de hierro, colocando mi espalda y la suela de mi sandalia sobre su superficie, dejando la mirada perdida en el horizonte y dando algún que otro sorbo a cada rato. a lo lejos llegaban Daruu y Ayame, todavía disfrazados, pero yo estaba tan ensimismado en el horizonte y en el campo de cultivo de calabazas que tenía al frente, al otro lado de la calle que ni siquiera me percaté.
![[Imagen: K1lxG4r.png]](https://i.imgur.com/K1lxG4r.png)
![[Imagen: dlinHLO.png]](https://i.imgur.com/dlinHLO.png)
Narro ~ Hablo ~ Pienso ~ Kumopansa