30/11/2018, 18:40
El senju volvió al lugar acordado de donde había partido hace un momento atrás. Esta vez llegó caminando con calma, mientras recorría el sendero naranja que tomaba color de las lámparas del camino. El viento frío lo despeinaba un poco y le adormecía la cara. El corredor formado de casas lo acercaba poco a poco a la pequeña plaza.
Pudo divisar a Yota, estaba sentado en el mismo banco donde se habían encontrado con Kumopansa. Apretó fuerte la mochila y una sonrisa se le dibujo en la boca. Volvió a mirar hacia atrás, dedicando una mirada de despedida a la nada. Y comenzó a caminar hacia el banco.
-Lamento si me demore un poco más
Dijo bastante animado y con una sonrisa mientras terminaba de recorrer últimos metros que los separaban.
-¿Todo listo?
Consultó el genin, mientras se detuvo cerca, esperando que el otro diera indicaciones para seguirlo. Geki no tenía idea si saldrían por la puerta principal de la aldea o por algún otro atajo.
Pudo divisar a Yota, estaba sentado en el mismo banco donde se habían encontrado con Kumopansa. Apretó fuerte la mochila y una sonrisa se le dibujo en la boca. Volvió a mirar hacia atrás, dedicando una mirada de despedida a la nada. Y comenzó a caminar hacia el banco.
-Lamento si me demore un poco más
Dijo bastante animado y con una sonrisa mientras terminaba de recorrer últimos metros que los separaban.
-¿Todo listo?
Consultó el genin, mientras se detuvo cerca, esperando que el otro diera indicaciones para seguirlo. Geki no tenía idea si saldrían por la puerta principal de la aldea o por algún otro atajo.