7/01/2019, 01:42
(Última modificación: 7/01/2019, 01:48 por Aotsuki Ayame. Editado 1 vez en total.)
Kōri simplemente se encogió de hombros y desvió la mirada hacia la pared del fondo de la celda.
—No, he venido a ver a mi hermana —terminó por responder—. Bueno, o a que ella me vea a mí. Sé que está ahí, en alguna parte, de modo que quiero recordarle que su familia no se ha olvidado de ella.
»Aunque Padre no va a bajar aquí. Quizás es mejor que no lo haga.
Kokuō dejó escapar el aire por la nariz en una seca risilla, carente de cualquier tipo de alegría. No, desde luego que aquel hombre la visitara, conociendo su carácter orgulloso y agresivo, podría ser la peor idea de la historia.
—La señorita está realmente feliz de tener a tanta gente que se preocupa por ella y viene a verla —comentó el bijuu, antes de ladear la cabeza hacia el jonin—. No es algo que yo pueda decir, ¿verdad? Todos mis hermanos están muertos o encerrados, después de todo.
—No, he venido a ver a mi hermana —terminó por responder—. Bueno, o a que ella me vea a mí. Sé que está ahí, en alguna parte, de modo que quiero recordarle que su familia no se ha olvidado de ella.
»Aunque Padre no va a bajar aquí. Quizás es mejor que no lo haga.
Kokuō dejó escapar el aire por la nariz en una seca risilla, carente de cualquier tipo de alegría. No, desde luego que aquel hombre la visitara, conociendo su carácter orgulloso y agresivo, podría ser la peor idea de la historia.
—La señorita está realmente feliz de tener a tanta gente que se preocupa por ella y viene a verla —comentó el bijuu, antes de ladear la cabeza hacia el jonin—. No es algo que yo pueda decir, ¿verdad? Todos mis hermanos están muertos o encerrados, después de todo.