17/02/2019, 17:55
— ¡Como olvidarme de Ryuusuke! ¿No te ha contado que yo le dí clases en la Academia? Justo cuando ascendí a Chunnin estuve un par de cursos enseñando a la peor generación que ha conocido Uzushiogakure, hasta que llegasteis vosotros y pasó todo lo de Zoku, claro. De la que fue despues de ti y de Nabi, dicen que no queda ni uno solo. Entre los que lo dejan y los que desaparecen, apenas quedan ninjas que asciendan a Chunnin. Sin contar que el idiota de mi hijo ni se presentó.
Mi madre ya se había sentado, Stuffy estaba de fiesta con Eri y mi padre acababa de llegar con dos vasos, uno para su amor y otro para él. Vamos, que no me echaba cuentas ni el tato.
— A ver, los menores de edad fuera de aquí, que los mayores estamos celebrando el festival como tiene que ser.
Mi madre le pegó un codazo que me dolió hasta a mí y tras un par de movimientos de cabeza, mi padre pareció entender lo que le decía.
— ¡Y para celebrar el ascenso de Eri! Por supuesto que sí. Por fin una chica responsable en una generación de liantes y tuertos. Felicidades, Eri. Gran trabajo en el examen y mucho mejor en el follón de después.
Soltó alegremente mientras daba un trago largo de lo que fuese que bebía. Yo por mi parte, fui retrocediendo lentamente, alejandome de la mesa y todos los presentes.
— Bueno... Yo voy a ver si pillo algo de comer.
De nuevo, ni una reacción, así que me dí la vuelta y me fui donde mejor oliese. A ver si llenaba mi tripita.
Mi madre ya se había sentado, Stuffy estaba de fiesta con Eri y mi padre acababa de llegar con dos vasos, uno para su amor y otro para él. Vamos, que no me echaba cuentas ni el tato.
— A ver, los menores de edad fuera de aquí, que los mayores estamos celebrando el festival como tiene que ser.
Mi madre le pegó un codazo que me dolió hasta a mí y tras un par de movimientos de cabeza, mi padre pareció entender lo que le decía.
— ¡Y para celebrar el ascenso de Eri! Por supuesto que sí. Por fin una chica responsable en una generación de liantes y tuertos. Felicidades, Eri. Gran trabajo en el examen y mucho mejor en el follón de después.
Soltó alegremente mientras daba un trago largo de lo que fuese que bebía. Yo por mi parte, fui retrocediendo lentamente, alejandome de la mesa y todos los presentes.
— Bueno... Yo voy a ver si pillo algo de comer.
De nuevo, ni una reacción, así que me dí la vuelta y me fui donde mejor oliese. A ver si llenaba mi tripita.
—Nabi—