22/03/2019, 01:39
Daruu, lívido, se detuvo, aparentemente asustado por las últimas palabras de Ayame. No, por todos los dioses, no. Lo último que quería ahora mismo es tener que pedirle al recepcionista otro juego de sábanas. ¿Qué excusa pondrían? Ayame podía, literalmente, explotar.
Lentamente, se bajó de encima y esta vez fue él el que le dio la espalda.
—Eres una tramposa de mierda, que lo sepas —bufó—. Yo te lo he contado. Hala, buenas noches.
Resopló de nuevo.
Lentamente, se bajó de encima y esta vez fue él el que le dio la espalda.
—Eres una tramposa de mierda, que lo sepas —bufó—. Yo te lo he contado. Hala, buenas noches.
Resopló de nuevo.
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)