30/03/2019, 18:47
—La lucha ha terminado —sentencio mientras se apoyaba de un árbol; agitarse tanto era malo para alguien de tan pobre condición física—. Deberías considerarte afortunado, pues estaba intentando no matarte… Aunque mereces que te saque las tripas como a una oveja, no tengo estomago para ello.
Se imaginó luchando a muerte, y creyó posible una lucha más fácil si hubiese buscado acabar con la vida de su oponente. De ahí aquel dicho entre los cazadores que aseguraba que capturar a una presa viva es mucho más difícil que darle muerte.
—¿Sabes? Es la primera vez que lucho contra un maleante sin tener la opción de huir —confeso tranquilamente—. Pensaba que al encontrarse acorralados dirían algo como: “¿Qué esperas? Hazlo, acaba conmigo”. Digo, me los imaginaba conscientes de que el “crimen” implica jugarse la vida.
»Es un poco iluso el esperar que todo salga bien teniendo como único respaldo una actitud ruda.
Kazuma camino lentamente hacia el lugar donde estaba su bokken, sin apartar la vista del malhechor y manteniendo la distancia entre ambos. Tomo su arma y se dirigió al enemigo caído:
—No sé cuánto tiempo me tome salir de aquí, por lo que no puedo correr el riesgo de que me sigas —explico, acercándose calmadamente mientras elevaba la espada de madera—. Te dejare inconsciente y me marchare… Espero que aprendas de esta experiencia…
»Se lo que estás pensando: ¿qué pasara conmigo? ¿Me atacara alguna fiera? La pregunta que tendrías que hacerte es: “¿Me siento con suerte hoy?".
Y así haría caer su arma sobre el maleante.
Se imaginó luchando a muerte, y creyó posible una lucha más fácil si hubiese buscado acabar con la vida de su oponente. De ahí aquel dicho entre los cazadores que aseguraba que capturar a una presa viva es mucho más difícil que darle muerte.
—¿Sabes? Es la primera vez que lucho contra un maleante sin tener la opción de huir —confeso tranquilamente—. Pensaba que al encontrarse acorralados dirían algo como: “¿Qué esperas? Hazlo, acaba conmigo”. Digo, me los imaginaba conscientes de que el “crimen” implica jugarse la vida.
»Es un poco iluso el esperar que todo salga bien teniendo como único respaldo una actitud ruda.
Kazuma camino lentamente hacia el lugar donde estaba su bokken, sin apartar la vista del malhechor y manteniendo la distancia entre ambos. Tomo su arma y se dirigió al enemigo caído:
—No sé cuánto tiempo me tome salir de aquí, por lo que no puedo correr el riesgo de que me sigas —explico, acercándose calmadamente mientras elevaba la espada de madera—. Te dejare inconsciente y me marchare… Espero que aprendas de esta experiencia…
»Se lo que estás pensando: ¿qué pasara conmigo? ¿Me atacara alguna fiera? La pregunta que tendrías que hacerte es: “¿Me siento con suerte hoy?".
Y así haría caer su arma sobre el maleante.