5/05/2019, 00:07
Pero, para su sorpresa; la Fragua de Runoara Soroku era la única que no estaba encendida. De su chimenea no salía humo, nada advertía que aquella casona estuviera funcionando como lo hacía desde hacía años.
Ese era, desde luego, el peor panorama que podría encontrarse Datsue. El peor presagio. ¿Que había alargado demasiado tiempo esa confrontación? pues, frente a sus ojos, tenía la respuesta a esa pregunta.
La puerta que daba entrada a la primera ala del galpón, bien conocido por el intrépido, estaba semi-abierta, eso sí. Así que, en principio, tendría que haber gente ocupándola.
¿Quién?
Pues tendría que averiguarlo.
Ese era, desde luego, el peor panorama que podría encontrarse Datsue. El peor presagio. ¿Que había alargado demasiado tiempo esa confrontación? pues, frente a sus ojos, tenía la respuesta a esa pregunta.
La puerta que daba entrada a la primera ala del galpón, bien conocido por el intrépido, estaba semi-abierta, eso sí. Así que, en principio, tendría que haber gente ocupándola.
¿Quién?
Pues tendría que averiguarlo.