17/07/2019, 13:09
—Bueno, ¿cómo estáis de ánimos para aguantar un poquito más despiertos?
De ánimos mal y de fuerzas aún peor. Katsudon se veía cansado, pero es que a mi me picaban los ojos y me costaba mantenerlos abiertos.
—Yo estoy bien.
Si, estaba bien cansada. Quizás ella podía aguantar mas tiempo que yo despierta, pero esos bostezos eran sinónimo de que quería dormir.
—¿Y tú, Reiji? Podemos buscar un sitio para pasar la noche o tratar de conseguir un barco con nocturnidad y pasar la noche en el mar. Adelantaríamos, pero como tú te veas.
—Si damos con el barco rápido, creo que puedo aguantar, pero la verdad es que apenas puedo mantenerme despierto.
Era la primera vez que viajaba tan lejos, era normal que no pudiera con mi alma, pero sobraban las excusas.
Por lo menos, Katsudon había vuelto a hablarme.