Este foro utiliza cookies
Este foro utiliza cookies para guardar tu información de inicio de sesión si estás registrado, y tu última visita si no lo estás. Las cookies son pequeños documentos de texto guardados en tu ordenador; las cookies establecidas por este foro sólo pueden ser utilizadas en este mismo sitio y no poseen riesgos de seguridad. Las cookies de este foro también llevan un registro de los temas que has leído y cuándo fue la última vez que los leíste. Los administradores NO tienen acceso a esta información, sólo TU NAVEGADOR. Por favor confirma si aceptas el establecimiento de estas cookies.

Se guardará una cookie en tu navegador sea cual sea tu elección para no tener que hacerte esta pregunta otra vez. Podrás cambiar tus ajustes sobre cookies en cualquier momento usando el link en el pie de página.
Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
#2
La peliblanca se acababa de desviar del camino principal para seguir en dirección al valle, puesto que este se desviaba hacia el Noreste para terminar rodeando el lugar. La nueva senda, a diferencia de la anterior, era un pequeño sendero de tierra de nos más de dos metros de ancho (quizás un poco menos) que serpenteaba entre los árboles y arbustos.

Apenas podía ver el cielo gris que parecía amenazar tormenta o quizás se estaba tomando un respiro, pues la joven podía sentir como sus pasos se hundían en la tierra mojada.

Ajena al riesgo de terminar mojada, Mitsuki, avanzaba distraída observando la flora de aquel lugar. Era muy diferente a la que estaba acostumbrada, de hecho, desde que estaba en el continente no había visto más que árboles de mil formas diferentes. La variedad sin duda era mayor que en su lugar de origen, quizás fuese por el gran abanico de climas que había podido disfrutar en sus pocos trayectos o al menos eso era lo que ella pensaba.

Sus pasos la llevaron a atravesar el lindero del bosque, quedando justo frente al gran lago que surtía de agua a la catarata que se adueñaba del lugar con su ensordecedor sonido. La primera impresión de la Hyuga fue dar la razón a todos los que le habían recomendado ir a ese lugar, aquellas tres enormes estatuas rodeadas por agua y bosque tenían algo que dejaría a cualquiera sin palabras. Sin duda era un lugar digno de su leyenda, un monumento a la altura de la hazaña que conmemoraban.

Mitsuki avanzó unos pasos, alejándose del linde del bosque en dirección a la orilla del lago. Justo cuando avanzaba se dio cuenta que bastante cerca de ella, apenas unos metros a su derecha había alguien que también parecía estar absorbida por el lugar. Aunque tan sólo pudo ver el perfil, cantaba a la vista que debía de ser una kunoichi (como ella ahora mismo), el brillo metálico en su frente y aquellos ropajes entre tonos azulados y violáceos casi lo confirmaban.

No era la primera vez que la Hyuga se topaba con alguien de otra aldea, ni tampoco la primera vez que lo hacía fuera de una ciudad. Aún así se sentía un poco nerviosa, ¿sería de taki o de otra aldea? La verdad es que no lo sabría hasta que se girase y pudiese ver el símbolo de su bandana. Sin embargo, esta vez decidió apartar sus dudas y tratar de no seguir titubeando en todo. Sin más preámbulos, decidió romper el hielo mientras dejaba que su mirada se perdiese en el paisaje.

—Es precioso...— comento la joven que avanzó hasta quedar justo a la derecha de la joven, separada por apenas un par de metros o quizás un poco más. Lo hizo con voz suave y sin disimular sus pasos, no quería asustar a la otra kunoichi pero tampoco quería forzar la situación.
Responder


Mensajes en este tema
Bajo la sombra de los Tres - por Aotsuki Ayame - 19/11/2015, 19:14
RE: Bajo la sombra de los Tres - por Yuki - 26/11/2015, 13:23
RE: Bajo la sombra de los Tres - por Yuki - 1/12/2015, 23:32
RE: Bajo la sombra de los Tres - por Yuki - 9/12/2015, 01:35
RE: Bajo la sombra de los Tres - por Yuki - 14/12/2015, 01:02
RE: Bajo la sombra de los Tres - por Yuki - 5/01/2016, 14:13
RE: Bajo la sombra de los Tres - por Yuki - 8/01/2016, 13:07
RE: Bajo la sombra de los Tres - por Yuki - 11/01/2016, 21:54
RE: Bajo la sombra de los Tres - por Yuki - 17/01/2016, 19:38
RE: Bajo la sombra de los Tres - por Yuki - 28/01/2016, 23:26


This forum uses Lukasz Tkacz MyBB addons.