14/11/2019, 13:49
Inicialmente Katsudon no se había dado cuenta del arma que casi le acierta en toda la cabezota, pero un instante después la reacción de Reiji le hizo ponerse a la defensiva. De inmediato, ambos ninjas pegaron las espaldas, Reiji mirando a la barra del bar y Katsudon...
—Chico, ¡la ventana! —exclamó el hombretón. Estaba abierta.
—Esto no me gusta un pelo, Katsudon... —Luego le dije algo en voz baja, por que, obviamente, nos estaban escuchando. —Yo nunca me he curado un corte así de rápido... Excepto el de barco... ¿Qué me esta pasando?
—No lo sé, bueno, algo sé, ¡pero ahora presta atención a eso! —Señaló a la ventana. Dos hombres con capas blancas con capucha saltaron el marco y desenvainaron sendas espadas. En sus frentes brillaba la misma bandana que la de los hombres que atacaron el barco.
—¿¡Hombres de Kurama!? —exclamó Katsudon.
Los dos asaltantes se miraron con los ojos muy abiertos y se abalanzaron sobre la pareja de ninjas de Uzushio, el de la derecha, más cercano a Katsudon, levantando ya el arma. El hombretón hizo extender su puño hasta que abarcó medio hombre y le golpeó, levantándole los pies del suelo, desarmándolo y haciéndolo caer al suelo a rastras hasta casi la pared.
El de la izquierda, sin embargo, no parecía centrar su atención en Reiji, sino que aprovechó que Katsudon había estirado el brazo para tratar de cercenarlo con su espada.
—¡Mierda!
Ninja misterioso (izquierda):
–
–
Ninja misterioso (derecha):
– (-80)
–
—Chico, ¡la ventana! —exclamó el hombretón. Estaba abierta.
—Esto no me gusta un pelo, Katsudon... —Luego le dije algo en voz baja, por que, obviamente, nos estaban escuchando. —Yo nunca me he curado un corte así de rápido... Excepto el de barco... ¿Qué me esta pasando?
—No lo sé, bueno, algo sé, ¡pero ahora presta atención a eso! —Señaló a la ventana. Dos hombres con capas blancas con capucha saltaron el marco y desenvainaron sendas espadas. En sus frentes brillaba la misma bandana que la de los hombres que atacaron el barco.
—¿¡Hombres de Kurama!? —exclamó Katsudon.
Los dos asaltantes se miraron con los ojos muy abiertos y se abalanzaron sobre la pareja de ninjas de Uzushio, el de la derecha, más cercano a Katsudon, levantando ya el arma. El hombretón hizo extender su puño hasta que abarcó medio hombre y le golpeó, levantándole los pies del suelo, desarmándolo y haciéndolo caer al suelo a rastras hasta casi la pared.
El de la izquierda, sin embargo, no parecía centrar su atención en Reiji, sino que aprovechó que Katsudon había estirado el brazo para tratar de cercenarlo con su espada.
—¡Mierda!
Ninja misterioso (izquierda):
100/100
80/80
Ninja misterioso (derecha):
20/100
80/80
Esta cuenta representa a la totalidad de los administradores de NinjaWorld.es