El acero peregrino

[Sasaki Reiji]

Al principio había parecido una tontería hablarle al barco, pero resulto ser un buen chico obediente. Quizás incluso me llevaba por el buen rumbo, así que, ¿Por que no mantenerlos? El tesoro que había en esa dirección tampoco olía nada mal.

—Voy a traerle algo de agua, a ver si así se despierta. Ten cuidado de que no le de un yuyu

Asentí con la cabeza mientras miraba al pobre Katsudon, que parecía empezar a recobrar el sentido.

—Aeeoo. Ao. Eijiiiiiiii...

—¿Pero como se te ocurre ponerte tu al timón?—Dije en tono un poco autoritario. —Si,si,si ya se que el Jounin eres tu, pero ahora me toca echarte a mi la bronca, que el capitan de este barco soy yo.

No se veía absolutamente nada a lo lejos. La única la luz era la de la cabina del capitan. El mar, por la noche, era aterrador. Por la incertidumbre mas que nada.

—Si es que el mar, a oscuras, me asusta hasta a mí. ¿Has probado alguna vez a emborracharte? Quizás te haga los trayectos mas llevaderos. A mi no me gusta mucho el alcohol, pero seguro que Datsue puede hacerte una buena recomendación