3/02/2020, 10:27
Daisuke comprobó levemente desilusionado la negativa del cantante.
—Si te soy sincero no creo que sea buena idea. Como mencioné antes, yo ya estoy de salida para volver a mi aldea. Pero si algún día de verdad necesitas un guía en Amegakure. Quizá yo ye puedo dar una mano. Eso sí, por adelantado te doy un consejo. Si de verdad alguna vez visitas el País de la Tormenta, lleva paraguas o una buena capa impermeable, que no querrás pescar un resfriado y luego morirte de una hipotermia.
El Nara asintió con su cabeza en señal de afirmación, y acto seguido, mostró una sonrisa.
— Lo tendré en cuenta. Gracias por la información. — Respondió amablemente.
—Quizá ahora si me toca despedirme, que mi tren sale en un par de horas y de por sí da un montón de vueltas... Supongo que este es el momento donde a mí me toca decir hasta luego.
— Bueno, pues... hasta luego. — Dijo Daisuke sonriendo mientras volvía a extender su mano derecha hacia su compañero Gennin. — Tengo la ligera impresión de que volveremos a vernos más pronto de lo que creo. — Añadió el rubio, a modo de presentimiento. — Es como si el mundo entero se hubiese vuelto más loco de lo que ya estaba, ¿verdad? Parece que todo está a punto de explotar en algún momento, con la reunión de los Kages, los Bijuus por ahí sueltos y descontrolados en su mayoría... — Hizo una breve pausa mientras meditaba. — A decir verdad, me dan cierta pena. Parece como si estuvieran llenos de odio, resentimiento, dolor y sufrimiento. Ojalá alguien algún día pueda hacer algo para ayudarlos. — Sin duda, su forma de pensar era muy diferente de la del resto de las personas normales y corrientes. Tenía algo de lo que muchos carecían: empatía y compasión por el prójimo.
—Si te soy sincero no creo que sea buena idea. Como mencioné antes, yo ya estoy de salida para volver a mi aldea. Pero si algún día de verdad necesitas un guía en Amegakure. Quizá yo ye puedo dar una mano. Eso sí, por adelantado te doy un consejo. Si de verdad alguna vez visitas el País de la Tormenta, lleva paraguas o una buena capa impermeable, que no querrás pescar un resfriado y luego morirte de una hipotermia.
El Nara asintió con su cabeza en señal de afirmación, y acto seguido, mostró una sonrisa.
— Lo tendré en cuenta. Gracias por la información. — Respondió amablemente.
—Quizá ahora si me toca despedirme, que mi tren sale en un par de horas y de por sí da un montón de vueltas... Supongo que este es el momento donde a mí me toca decir hasta luego.
— Bueno, pues... hasta luego. — Dijo Daisuke sonriendo mientras volvía a extender su mano derecha hacia su compañero Gennin. — Tengo la ligera impresión de que volveremos a vernos más pronto de lo que creo. — Añadió el rubio, a modo de presentimiento. — Es como si el mundo entero se hubiese vuelto más loco de lo que ya estaba, ¿verdad? Parece que todo está a punto de explotar en algún momento, con la reunión de los Kages, los Bijuus por ahí sueltos y descontrolados en su mayoría... — Hizo una breve pausa mientras meditaba. — A decir verdad, me dan cierta pena. Parece como si estuvieran llenos de odio, resentimiento, dolor y sufrimiento. Ojalá alguien algún día pueda hacer algo para ayudarlos. — Sin duda, su forma de pensar era muy diferente de la del resto de las personas normales y corrientes. Tenía algo de lo que muchos carecían: empatía y compasión por el prójimo.